Se denomina atraso al acto y resultado de atrasar: demorar, aplazar, dilatar o diferir. Por ejemplo: «Le voy a explicar al jefe que el atraso se debió a un problema con mi automóvil», «Disculpe por el atraso, señor, pero tuvimos un inconveniente en la cocina: enseguida le traigo su plato», «El tren partió con un atraso de media hora».
El atraso se vincula al tiempo, como se puede advertir en nuestros ejemplos anteriores. Cuando un empleado llega tarde a su lugar de trabajo, incurre en un atraso. Lo mismo puede decirse con el camarero que tarda más de lo habitual al llevar un plato a la mesa. Por otra parte, si una formación del ferrocarril tenía que iniciar un viaje a las 7 horas pero salió de la estación a las 7.30 horas, tuvo un atraso de treinta minutos.
Precisamente en relación a ese concepto tenemos que establecer que en España, por ejemplo, se realizan dos cambios de hora a lo largo del año. Uno, en el mes de octubre, consiste en atrasar el reloj una hora. El segundo, que tiene lugar durante el mes de marzo, lleva a adelantar los relojes una hora. Cambios que se llevan a cabo, según establecen las autoridades, para aprovechar la mayor cantidad posible de luz natural y ahorrar en energía.
Esas modificaciones hay que tener en cuenta que suelen afectar al organismo de los ciudadanos. De ahí que, hasta que se adapten al nuevo horario, tengan que hacerle frente, sobre todo, a problemas para conciliar el sueño y para descansar de forma adecuada.
La idea de atraso también aparece con el incumplimiento de las fechas acordadas para realizar un cierto pago: «El dueño de la casa me dijo que no iba a tolerar más atrasos en el pago del alquiler», «¿A qué se debe el atraso con la cuota? Habíamos quedado en que me ibas a pagar en los primeros cinco días de cada mes».
De la misma puede ocurrir que un trabajador lleve un notable atraso en el desempeño de sus funciones. Es decir, que, por distintas circunstancias, no lleve su trabajo al día y tenga muchas tareas atrasadas.
Atraso, por otra parte, puede asociarse a una falta de desarrollo: «El atraso de este pueblo es evidente: no tiene agua potable ni luz eléctrica», «El país necesita inversiones para salir del atraso», «Para competir con las empresas extranjeras, tenemos que lograr escapar del atraso tecnológico».
La noción de atraso, por último, se vincula a una demora en el inicio del ciclo menstrual. Puede deberse a un estado de ansiedad, una enfermedad, un trastorno hormonal o al embarazo.
No obstante, no son las únicas causas que pueden explicar que una mujer sufra un atraso en lo que es su menstruación. En concreto, también pueden generar esa situación desde una interrupción de lo que es la píldora anticonceptiva hasta un cambio notable en lo que es su peso o la existencia de problemas alimentarios.
Asimismo, también pueden ser responsables desde que la fémina esté llevando a cabo una actividad física excesiva hasta que le esté dando el pecho a su hijo o que cuente con problemas de tiroides. Y eso sin olvidar la menopausia o que posea lo que se conoce como ovarios poliquísticos.
