Sífilis

La sífilis es una enfermedad crónica, de carácter infeccioso, que se transmite a través de las relaciones sexuales o mediante la descendencia. La infección es provocada por una bacteria denominada Treponema pallidum, que forma parte del filo de las espiroquetas.

Es interesante mencionar que Sífilis es un término cuya etimología remite a Siphylo, que es el nombre de un personaje creado por el escritor y médico Jerónimo Fracastoro (1478–1553) en su poema “De Morbo Gallico”.

El origen de la sífilis no está claro. Algunas teorías sostienen que la enfermedad ya existía en tiempos precolombinos y que los conquistadores europeos, al volver a su tierra de origen, la llevaron al Viejo Continente.

Transmisión de la sífilis

La Treponema pallidum, que tiene una longitud menor a los 15 micrómetros y un diámetro que no supera los 0,2 micrómetros, se multiplica mediante la división simple. Su transmisión puede producirse a través de relaciones sexuales (incluyendo el sexo oral), besos en la boca o las jeringas compartidas. Una madre, por su parte, puede contagiar sífilis a su bebé mediante el canal de parto.

Compartir indumentaria, utensilios de cocina o baño, en cambio, no propicia la transmisión de sífilis, al igual que las transfusiones sanguíneas. Si se emplea preservativo en la relación sexual, por otro lado, la posibilidad de contagio se minimiza.

Otros datos de interés

Además de todo lo expuesto, merece la pena conocer otros datos de interés al respecto, entre los que se encuentran los siguientes:

Se considera que los ejércitos monárquicos franceses la propagaron por todo el Viejo Continente, de ahí que en algunos rincones del mismo se la conociera como el “mal francés”.
Como hemos mencionado se puede transmitir a través de las relaciones sexuales, aunque no exista penetración ni intercambio de fluidos.
La principal manera de diagnosticarle a una persona si sufre sífilis es sometiéndola a una analítica. No obstante, también se puede optar por obtener una muestra de líquido de las lesiones que presente.
Es importante saber que quienes cuentan con esta patología tienen más riesgos de poder infectarse del VIH.
Aunque se consideraba que era una infección ya bastante “desfasada”, lo cierto es que en los últimos tiempos ha vuelto a hacerse muy presente a partir de distintos casos que se han dado a conocer en Estados Unidos. Y es que en determinadas zonas del país, como sería Texas, ha aumentando hasta en un 70% el número de individuos que la sufren.
En Europa, además, existen tres países que están a la cabeza en personas con sífilis, según datos de los últimos años. En concreto, nos estamos refiriendo a Alemania, Reino Unido y España.
A lo largo de la historia, muchos han sido los personajes que han tenido que hacerle frente a esa enfermedad, que siglos atrás ocasionó numerosos muertos. Entre las figuras más famosas está Al Capone.

Desarrollo y tratamiento de la sífilis

La sífilis se caracteriza, en una primera etapa, por la producción de lesiones conocidas como chancros, que son pápulas que segregan fluidos. La enfermedad, al avanzar, provoca dolor de cabeza, articulaciones y garganta; disminución de peso; fiebre y otros trastornos. Finalmente, en su última etapa, la sífilis genera lesiones en la médula espinal y el cerebro, cardiopatías y problemas en la visión, pudiendo derivar en la muerte del paciente.

Cabe destacar que la sífilis puede tratarse con penicilina y otros antibióticos, sin que deje secuelas cuando es tratada de manera rápida.