Lo primero que vamos a hacer antes de comenzar a analizar en profundidad el término significante es descubrir su origen etimológico. Al hacerlo nos topamos con el hecho de que es una palabra que procede del latín, más exactamente del vocablo “significantis”. Este se encuentra conformado por tres partes:
• El sustantivo “signa”, que puede traducirse como “señal”.
• El verbo “facere”, que es sinónimo de “hacer”.
• El sufijo “-nt”, que es equivalente a “agente”.
Concepto de significante
Significante es un adjetivo que refiere a algo que significa. El verbo significar, por su parte, puede estar vinculado a una cosa que es representación o indicio de otra distinta o a la frase que es expresión o signo de una idea o de algo material. Significar, además, es manifestar algo.
Por ejemplo: “El tenista argentino consiguió un triunfo significante para su carrera en Nueva York”, “Los analistas políticos consideraron que fue un discurso significante que traerá consecuencias”, “La obra más significante del artista alemán será expuesta en el Palacio Municipal de Bellas Artes a partir del próximo martes”.
La noción en la lingüística
La noción de significante también aparece en la lingüística. Se trata de un fonema o de una secuencia de fonemas que constituyen un signo lingüístico al asociarse con un significado.
El signo lingüístico, pues, es la unidad mínima de la oración y está compuesta por un significante y un significado, unidos en forma inseparable a través de la significación. Se conoce como significado, por otra parte, al contenido semántico de un signo, que está condicionado por el sistema y el contexto. El significado se establece a partir de su vínculo con el significante en el signo lingüístico.
Podemos considerar el caso de la palabra “casa”. Es un conjunto de fonemas articulados (/k/, /a/, /s/, /a/) cuyo significante designa un significado específico: el concepto mental de lo que es una “casa”, es decir, un edificio para habitar. El significante apunta o designa algo, mientras que el significado es aquello que es designado.
Aportes de diversos pensadores a la idea de significante
Muchos son los estudiosos de la lingüística, la semántica o la semiótica que, a lo largo de los siglos, han estudiado y analizado en profundidad el término significante. No obstante, entre las figuras más relevantes y que más aportaron al respecto se encuentran el lingüista suizo Ferdinand de Saussure, el filósofo estadounidense Charles Sanders Peirce y el psicoanalista francés Jacques Lacan.
Ese último intelectual hay que decir que partió de las teorías y conceptos de Saussure para darle una vuelta de tuerca al término de significante dentro de lo que sería la teoría del psicoanálisis de Freud. Así, aquel creó lo que dio en llamar lógica del significante que, entre otras muchas cosas, vino a dejar patente que un significante puede ser un síntoma, un objeto, una relación o una palabra.
De la misma manera, Lacan estableció que los significantes cambian de manera continuada de significado. De ahí que cuando un psicoanalista estuviera en una sesión con un paciente debía prestar especial atención a los significantes que aquel expresa ya que, aunque aparentemente tienen un significado, en realidad están planteando otros.