Se denomina andrología a la rama la de medicina dedicada a la investigación de las enfermedades que son propias del sexo masculino. La andrología sobre todo se centra en aquellos trastornos que inciden en la capacidad de reproducción del hombre.
La función sexual masculina
Los expertos en andrología, por lo tanto, analizan diferentes cuestiones vinculadas con la función sexual masculina. La infertilidad y los problemas de erección forman parte de su abordaje.
La andrología se complementa con la urología, que es la especialidad médica orientada al aparato urinario. Ambas disciplinas estudian problemáticas que se desarrollan en la zona genital.
Gracias a sus conocimientos, los especialistas en andrología están en condiciones de diagnosticar y tratar múltiples inconvenientes que afectan la capacidad reproductiva y la vida sexual de los hombres. Los tratamientos pueden llevarse a cabo mediante el suministro de fármacos o intervenciones quirúrgicas, por mencionar dos posibilidades.
Problemas que trata
Tomemos el caso de la disfunción eréctil. Este trastorno aparece cuando un hombre repetidamente tiene dificultades para conseguir o sostener una erección firme que le permita mantener una relación sexual, con lo cual la penetración se dificulta o directamente se imposibilita. Las causas de la disfunción eréctil pueden ser variadas: desde el efecto secundario de un fármaco hasta una lesión, pasando por una enfermedad o un impedimento psicológico. Para revertir esta patología, el médico que se especializa en andrología puede recetar un medicamento (como Viagra), indicar un tratamiento hormonal o sugerir una cirugía vascular.
Cabe mencionar que la balanitis, el varicocele, la torsión testicular y el cáncer de testículo son otras afecciones tratadas por la andrología. Resulta interesante señalar que hasta no hace mucho tiempo, la esterilidad del hombre se asociaba con la calidad y el porcentaje de espermatozoides, una visión anticuada que en la actualidad se ve reemplazada por la atención a los problemas antes mencionados, entre otros.
La andrología apareció para enmarcar todos estos trastornos y brindar un servicio de cuidado de la salud masculina, lo cual incluye un seguimiento de su función sexual y la prevención de todas las enfermedades asociadas. Volviendo al tema de la esterilidad, en términos estadísticos se estima que si un hombre y una mujer no logran concebir un hijo luego de un año de tener relaciones sexuales sin métodos anticonceptivos, entonces es probable que uno de los dos o ambos la padezcan.
Estos casos son de especial interés para la andrología, ya que alrededor de un cuarenta por ciento se atribuye a problemas en el hombre. A pesar de que a veces la solución sea relativamente sencilla o poco traumática, el mayor problema suele ser el pudor a consultar con un médico, algo que sufren muchos hombres cuando no pueden rendir sexualmente de manera normal con sus parejas.
Andrología y urología: diferencias
Una de las razones por las que suelen confundirse estas dos disciplinas es que la andrología es una subespecialidad de la urología. Esta última se encarga de las enfermedades y lesiones que puedan afectar el aparato urinario, pero lo hace tanto para los hombres como para las mujeres: ya sea que sufran cistitis, incontinencia o cálculos de diversos tipos, éstas y otras enfermedades que pueden afectar a ambos sexos, el urólogo es el médico adecuado para tratarlas.
La diferencia principal con la andrología, por lo tanto, es que se dedica de forma exclusiva al hombre, a los trastornos reproductivos masculinos. Esto ya podemos apreciarlo al echar un vistazo al origen etimológico de la palabra: el primero de sus tres componentes es andros, un término de origen griego que se traduce como «hombre»; luego tenemos logos, que da la idea de «tratado, estudio o palabra»; al final se encuentra el sufijo -ia, que denota «cualidad».