Para poder comenzar a conocer el significado del término atractivo turístico hay que descubrir su origen etimológico:
-La palabra atractivo deriva del latín, exactamente de «attractivus» y puede traducirse como «que trae hacia sí». Es fruto de la suma de tres componentes de dicha lengua: el prefijo «ad-«, que significa «hacia»; el verbo «trahere», que es sinónimo de «traer», y el sufijo «-tivo». Este se emplea para indicar una relación pasiva o activa.
-Sobre el sustantivo turismo existen distintas teorías. Unas, establecen que deriva del latín «tornus», que es equivalente a «movimiento»; y otras indican que en castellano se ha tomado del inglés «tourism», que, a su vez, deriva de la palabra francesa «tour«, que es sinónimo de «vuelta».
Qué es un atractivo turístico
La noción atractivo se vincula a aquello que consigue atraer (es decir, acercar hacia sí). Turístico, por su parte, alude a lo relativo al turismo: la actividad que consiste en viajar con fines de ocio o descanso.
Un atractivo turístico es un sitio o un hecho que genera interés entre los viajeros. De este modo, puede tratarse de un motivo para que una persona tome la decisión de visitar una ciudad o un país.
Principales características
El valor de los atractivos turísticos puede radicar en diferentes cuestiones. En algunos casos, se trata de espacios de importancia histórica. En otros, la atracción surge por la belleza natural. Más allá de lugares concretos (físicos), hay atractivos turísticos que son más bien simbólicos, como la gastronomía o la oferta de eventos.
El Museo del Louvre, por ejemplo, es un atractivo turístico de la ciudad de París. Miles de personas llegan cada año a la capital francesa con la intención de recorrer este museo que alberga destacadas obras de arte, como la Venus de Milo y «La Gioconda» de Leonardo da Vinci.
Los atractivos turísticos más conocidos
En todo el mundo hay atractivos turísticos de diversa índole. No obstante, entre los más significativos están los siguientes:
-Monumentos. En este caso, tenemos que establecer que la lista es larguísima, casi interminable. No obstante, nos topamos con algunos especialmente importantes como la Torre Eiffel, la Mezquita de Córdoba, la Alhambra de Granada, la Gran Muralla China, el Coliseo de Roma, el Cristo Redentor de Río de Janeiro, el Taj Mahal, la Plaza Roja de Moscú…
-Parques nacionales y bosques, como el Parque de Doñana (Huelva-Sevilla), el Parque de Yellowstone (Estados Unidos), el Parque de Garajonay (La Gomera), el Parque Nacional Natural de Las Orquídeas (Medellín)…
-Además del ya citado, otros museos que son atractivos turísticos de sus ciudades y países son el Museo del Prado de Madrid, el Museo Metropolitano de Nueva York, el Museo Británico de Londres…
La importancia de la protección
Los atractivos turísticos de distinta clase pueden combinarse entre sí para convertir una zona en un destino muy visitado. En regiones de México, por citar un caso, se combinan atractivos turísticos como la playa y las ruinas arqueológicas.
Debido a la importancia económica del turismo y a la relevancia cultural o natural, los atractivos turísticos suelen ser protegidos por las autoridades, que invierten grandes sumas de dinero en su conservación y promoción.