Cautivo, que procede del latín captīvus, es un adjetivo que se utiliza para calificar al ser humano o el animal que, por algún motivo, no es libre. El concepto refiere a quien se encuentra en cautiverio.
Por ejemplo: “Los investigadores creen que el empresario estuvo cautivo dos días antes de ser asesinado”, “Cuando el joven abría la puerta de su casa, fue atrapado por los secuestradores, que se lo llevaron cautivo en una camioneta de color negro”, “El ejército ingresó a la embajada por la fuerza y, tras un intenso tiroteo con los terroristas, logró rescatar a los cautivos”.
La noción suele usarse para nombrar a la persona que fue capturada por secuestradores, terroristas, invasores o enemigos. “La cautiva”, en este sentido, es el título de un extenso poema del escritor argentino Esteban Echeverría, donde detalla el secuestro de una mujer y de su esposo por parte de un grupo de indígenas.
El término que ahora nos ocupa también juega un papel esencial dentro de la Semana Santa. Y es que hay imágenes llamadas así. Quizás en España la más importante es la que responde al nombre popular de “El Cautivo”. Es de Málaga, se llama Nuestro Padre Jesús Cautivo y es una escultura de Jesucristo que data de los años 30. En concreto, fue realizada en el año 1934 por el granadino José Gabriel Martín Simón.
Realiza su estación de penitencia el Lunes Santo y se encuentra en la Iglesia de San Pablo. Se ha convertido en una de las imágenes más importantes de toda la ciudad andaluza.
Cuenta con una altura de 177 centímetros, está realizada en madera policromada y la misma viene a representar a Jesucristo maniatado, triste y con la cabeza agachada. Asimismo hay que destacar que cuenta con potencias de oro, escapulario y túnica blanca.
Los animales cautivos, por su parte, son aquellos que se encuentran enjaulados o que no viven libremente en su hábitat natural por acción del hombre. Los ejemplares que se encuentran en un zoológico, por lo tanto, están en cautiverio.
La idea de mercado cautivo, por otro lado, alude a la situación existente cuando, en un mercado, no existe la competencia debido a las barreras que impiden el ingreso y la participación de otros actores. El mercado cautivo funciona como un oligopolio o como un monopolio.
Existen distintos métodos para crear un mercado cautivo. Las trabas burocráticas, las exigencias técnicas desmedidas o el pago de aranceles muy elevados son algunos de estos mecanismos.
Dentro del ámbito del cine, nos encontramos con varias películas que utilizan en sus títulos la palabra que nos ocupa. Este sería el caso, por ejemplo, de “El cautivo”, que llegó a la gran pantalla en el año 2015.
Jerry Jameson es el director de este largometraje, protagonizado por actores de la talla de Mimi Rogers, David Oyelowo y Kate Mara. Cuenta la historia de una mujer que, cuando se encuentra superando una grave adicción a las drogas, es secuestrada en su propia casa. El secuestrador no será otro que un hombre que huye de la justicia después de haber acabado con la vida de un juez.