Un dibujo es una figura, imagen o delineación que se suele hacer de forma manual con la ayuda de algún instrumento (como un lápiz o un pincel) sobre distintos materiales. El término hace referencia tanto a la figura en sí como al arte que enseña a dibujar. Por ejemplo: “Mi hijo hizo un dibujo de toda la familia y me lo regaló para mi cumpleaños”, “Necesito hacer un dibujo del cuerpo humano como tarea escolar”, “Mi profesor de dibujo dice que tengo talento”, “Bárbara realizó un hermoso dibujo de flores mientras esperaba su turno con el dentista”.
Antes de continuar con el análisis del significado, vamos a determinar el origen etimológico del concepto. En este sentido, tenemos que establecer que la palabra dibujo procede de un verbo francés: déboissier, que puede traducirse justamente como “dibujar”.
Tipos de dibujos
Existen muchos tipos de dibujos. Así, por ejemplo, nos encontramos con el dibujo a mano alzada; es decir, sin apoyar la mano en ningún momento sobre la superficie concreta. Pueden emplearse lápices de colores, rotuladores, bolígrafos, acuarelas, tinta china u otros materiales e instrumentos.
También está el dibujo lineal que, como su propio nombre indica, es aquel que se compone de una serie de formas geométricas y de segmentos de diversa índole. Cada figura geométrica se realiza haciendo uso de utensilios tales como las reglas, la escuadra, el compás, el cartabón… Cuando se utiliza un recurso informático para la ilustración, como programas de dibujo, se habla de dibujo digital.
Si nos centramos en las características de lo ilustrado, se puede diferenciar entre el dibujo expresionista, el dibujo figurativo, el dibujo realista, el dibujo simbólico, el dibujo abstracto, el dibujo conceptual o el dibujo surrealista, entre otras categorías.
El dibujo técnico, en tanto, es una representación gráfica que aporta la información necesaria para analizar un objeto, contribuir en su diseño y posibilitar su construcción. En este grupo podemos incluir al dibujo arquitectónico o dibujo de arquitectura, por mencionar una posibilidad.
Las animaciones
Tampoco podemos olvidar al llamado dibujo animado, que es aquel que trazan dibujantes y que luego, a través de determinadas herramientas del ámbito del cine y la televisión, “cobra vida”. De esta forma, se crean series y películas protagonizadas por estos singulares personajes.
Tal es la calidad técnica y complejidad narrativa que actualmente tienen los dibujos animados realizados por grandes compañías que tanto niños como adultos se han convertido en auténticos fans de este tipo de producciones. Así, en materia de animación, podríamos destacar series como la protagonizada por Bob Esponja o la ya clásica familia Simpson.
En materia cinematográfica muchas son las películas que a lo largo de la historia han conseguido un gran éxito. Así, estarían “Dumbo”, “La Bella y la Bestia”, “Cars”, “Toy Story”, “Monstruos S.A”, “Brave” y “Tarzán”, entre muchas otras.
El dibujo a lo largo de la historia
Los dibujos siempre han jugado un rol muy importante en la expresión humana. En la prehistoria, los seres humanos dibujaban sobre las paredes o techos de las grutas en las que vivían para transmitir ciertos conocimientos o retratar momentos de su vida. Los dibujos de escenas de caza eran habituales.
Durante la Edad Media, los dibujos coloreados fueron muy utilizados para explicar o ampliar ciertos textos, generalmente religiosos. Se trataba de dibujos simbólicos y no tan realistas. A partir del Renacimiento, el dibujo intentó parecerse cada vez más a la realidad.
Su importancia en la infancia
El dibujo es muy importante en la infancia. Se trata de un vehículo de expresión que le permite a los niños plasmar sus pensamientos, comunicar sus emociones y mostrar sus percepciones.
Dibujar también ayuda a mejorar la motricidad fina, potencia la creatividad y sienta las bases para el desarrollo de la escritura. Por eso es importante incentivar a los chicos a que dibujen en un papel u otro soporte desde temprana edad.
El dibujo en la infancia atraviesa diversas etapas, desde el inicio con garabatos hasta lograr una representación de la figura humana y, más adelante, precisión en las proporciones, perspectivas, etc.
Según la edad, es habitual el dibujo de animales, el dibujo de vehículos, el dibujo de superhéroes, el dibujo de robots, el dibujo de monstruos o el dibujo de dragones, por ejemplo. Cada pequeño tiene sus preferencias: en algunos casos, ese apego por el dibujo puede plasmarse en un interés por el cómic, el manga o la novela gráfica.
Otros usos de la noción de dibujo
El concepto de dibujo también permite nombrar a los bordados o relieves que adornan un objeto:“Me encanta el dibujo de este mantel”.
La noción, asimismo, alude al conjunto de hendiduras que presenta un neumático: “El piloto se vio obligado a cambiar los neumáticos por otros con un dibujo distinto y mayor adherencia a la pista”.
Palabra de experto
Personalidad Destacada de la Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, Miguel Repiso (Rep) es un dibujante argentino de gran trayectoria. Autor de más de treinta libros, también es muralista y trabajó en televisión y radio.
Referente del humor gráfico, sus viñetas y tiras aparecen diaria o semanalmente en diversos periódicos y revistas de América Latina. Además se caracteriza por dibujar en vivo, ya sea sobre el escenario o mientras entrevista a personalidades en TV.
– ¿Qué considerás al dibujar en vivo en un escenario o una entrevista? ¿Hay mucho trabajo previo o te enfocás más en el momento?
Cuando es así, performático, extraigo en el momento todo lo pensado y vivido, sin red, y sin miedo al ridículo. Siempre. Con mucho respeto al espectador o al entrevistado. El trabajo previo es haber trabajado los temas toda la vida.
Miguel Repiso (Rep)
– ¿Qué rasgos o particularidades buscás realzar cuando dibujás a un personaje histórico o una figura pública?
Me interesan los personajes y personas de la literatura o del arte, no tanto ya los históricos o políticos. Y los trabajo leyéndolos, viéndolos, repasándolos, pensándolos y luego se transforman en dibujos y en humor.
Miguel Repiso (Rep)