Antes de entrar de lleno en el significado del término díscolo, vamos a proceder a conocer su origen etimológico. En este caso podemos exponer que deriva del latín, exactamente de “dyscolus” que, a su vez, deriva del griego “dýscolos”. Este término puede traducirse como “difícil”.
Se trata de un adjetivo que califica a aquel que no suele acatar las reglas u obedecer las normas.
Por ejemplo: “Harto de las actitudes del díscolo delantero, el entrenador le pidió al presidente del club que rescinda el contrato del jugador”, “El presidente debe enfrentar la oposición de un sector díscolo de su propio partido”, “De chico era algo díscolo, pero luego maduré y empecé a actuar responsablemente”.
Entre los sinónimos de díscolo están indisciplinado, desobediente, rebelde, revoltoso o travieso. Por el contrario, entre sus antónimos nos encontramos con disciplinado, obediente, bienmandado o incluso dócil.
Un individuo díscolo es una persona difícil de tratar ya que no es dócil ni se integra con facilidad a los grupos. El díscolo no está dispuesto a cumplir órdenes ni a seguir instrucciones. Por eso suele enfrentarse con sus jefes o superiores jerárquicos, e incluso con las autoridades.
Tomemos el caso de un diputado que decide no respetar los mandatos de su partido político. Por eso vota de acuerdo a su voluntad, sin conversar con sus compañeros y sin preocuparse por lo acordado en el seno de su organización. Además muchas veces critica en los medios de comunicación a dirigentes de su misma entidad. Debido a estas particularidades, podría decirse que se trata de un diputado díscolo.
El jugador de básquetbol (baloncesto) que llega a tarde a los entrenamientos, no le hace caso al entrenador en el campo de juego y se muestra bebiendo alcohol y fumando en discotecas puede ser definido como un deportista díscolo.
Precisamente en el seno del equipo de fútbol del F.C. Barcelona se considera que han existido, a lo largo de su historia, jugadores díscolos. Este sería el caso, por ejemplo, de Neymar o de Ronaldo. No obstante, en los últimos tiempos el futbolista que se ha llevado ese calificativo ha sido el francés Dembélé. Y es que no solo ha llegado tarde a los entrenamientos sino que, además, ha hecho lo propio con algunas concentraciones.
Un cantante díscolo, por su parte, es aquel que no respeta los horarios de los conciertos, contesta agresivamente en las conferencias de prensa y no presta atención a sus fanáticos.
De la misma manera es habitual hablar de hijo díscolo cuando este no obedece en absoluto a sus padres, no acata las normas que hay en casa y no colabora en las tareas del hogar, no llega a la hora que se le indica cuando sale de fiesta e incluso deja de lado los estudios. Esas situaciones han llevado a la aparición de un programa de televisión, titulado “Hermano mayor”, en el que un adulto responsable viene a intentar encauzar a ese hijo en pro no solo de su presente sino, sobre todo, de su futuro.
