El adjetivo engorroso se utiliza para calificar a aquello que resulta arduo o fastidioso. Las actividades engorrosas suelen ser realizadas por obligación, sin que la persona sienta interés o atracción por ellas.
Por ejemplo: “Planchar la ropa me resulta muy engorroso, pero debe hacerlo ya que la buena presencia es importante en mi trabajo”, “Los trámites que hay que realizar a la hora de comprar un automóvil usado son algo engorrosos”, “El jefe me envió a ordenar el archivo: ¡qué engorroso!”.
Entre los sinónimos de engorroso nos encontramos con pesado, desagradable, arduo, molesto e incluso fastidioso. Por el contrario, entre sus antónimos podemos destacar algunos tales como fácil, ligero, sencillo o agradable.
Por lo general los individuos tratan de evitar las tareas engorrosas. Sin embargo, hay muchas acciones que deben llevarse a cabo por más que sean aburridas ya que, una vez realizadas, brindan algún tipo de beneficio o permiten cumplir con alguna obligación.
Lavar los platos después de cenar, por citar un caso, puede ser engorroso. Pero si los platos que se utilizaron en la mesa no se lavan, al otro día obviamente seguirán sucios y no se podrán volver a usar. Por lo tanto, en algún momento habrá que lavarlos o nunca más estarán en condiciones de ser usados. En definitiva, es preferible cumplir cuanto antes con la engorrosa tarea de lavarlos y que queden disponibles para una nueva comida.
En el ámbito doméstico es donde todo el mundo está de acuerdo que hay más tareas engorrosas. De ahí que siempre haya individuos que intenten evitar realizarlas para que así de esas se encarguen otras personas que convivan con ellas. Y eso puede dar lugar a numerosos conflictos ya no solo entre miembros de una pareja sino entre los de una familia.
En concreto, los últimos estudios llevados a cabo han venido a dejar patente que las diez labores que hay que hacer en el hogar que están consideradas más pesadas son limpiar el horno, limpiar los baños, planchar la ropa, limpiar los cristales, limpiar a fondo el frigorífico, doblar la ropa que se ha lavado y secado, acabar con el polvo de los muebles e incluso establecer el menú de comidas para toda la semana.
En el ámbito laboral es muy habitual el utilizar el término engorroso. En este caso, se suele emplear para hacer mención a esas tareas que nadie quiere hacer porque resultan muy arduas o pesadas, por ejemplo.
Es frecuente que haya personas que parezca que siempre tienen la “habilidad” de ser encargadas de acometer esas labores engorrosas. Por eso, lo que deben hacer es estar alertas para detectarlas y deben hacerles ver a sus jefes que están hasta arriba de trabajo y no pueden asumir más tareas.
En ocasiones, hay que cumplir con cuestiones burocráticas que también resultan engorrosas, aunque son obligatorias. Un trabajador autónomo debe registrarse y luego presentar declaraciones juradas de manera periódica para informar sus ingresos al fisco y abonar los impuestos correspondientes. Aunque esto puede ser difícil o molesto, es imprescindible para estar en regla.