El adjetivo inadvertido alude a aquello que no fue o no es advertido. Lo advertido, a su vez, es lo registrado, notado, avisado o anticipado.
Por ejemplo: “El codazo del jugador alemán al chileno pasó inadvertido para el árbitro”, “Es importante tener en cuenta que, muchas veces, el abuso infantil es un delito inadvertido”, “No puedo entender cómo el discurso del presidente ha pasado inadvertido”.
Entre las palabras que ejercen como sinónimo de inadvertido nos encontramos con algunas tales como descuidado, desprevenido, distraído o desapercibido. Por el contrario, entre sus antónimos con topamos con términos como cuidado, prevenido, percibido, advertido o avisado, por ejemplo.
Cuando algo resulta inadvertido, por lo tanto, no es detectado. Supongamos que una actriz muy reservada con su vida privada participa de un evento público. La joven lleva un anillo en su mano derecha que podría entenderse como una prueba de que se ha comprometido o que ha contraído matrimonio. Sin embargo, el detalle pasa inadvertido para todos los presentes. Recién algunos días más tarde, un periodista nota la presencia del anillo a través de una fotografía y comienza a realizar conjeturas.
Tomemos el caso de un prófugo de la Justicia que, para evitar ser atrapado por las autoridades, abandona su ciudad y se radica en otro pueblo. Con el objetivo de pasar inadvertido, el hombre mantiene un perfil bajo, estableciendo un contacto acotado con sus nuevos vecinos. Además se corta el cabello y se deja crecer la barba. Mientras logre seguir pasando inadvertido, la policía no lo atrapará.
Si un niño se niega a comer verduras, por otra parte, su madre puede ingeniárselas para incluir estos alimentos nutritivos en la dieta del pequeño y conseguir que pasen inadvertidos. La mujer puede procesar las verduras y añadirlas como relleno de determinadas preparaciones, por citar una posibilidad.
De la misma manera, tenemos que tener en consideración que hay distintas obras culturales que utilizan en sus títulos el término que ahora nos ocupa. Este sería el caso del libro “Inadvertido”, que fue publicado en el año 2016 y que está escrito por el autor José Francisco Martínez Vidal.
No obstante, otro ejemplo de ello es la obra del escritor italiano Francesco Piccolo (1964) titulada “Momentos de inadvertida felicidad”. Esta se publicó en el año 2010 y se convirtió en un verdadero éxito de ventas tanto en su país como fuera del mismo.
Este trabajo cuenta con unas grandes dosis de humor y lo que hace es abordar aquellos momentos, situaciones inesperadas, pequeños placeres de la vida y los pequeños hechos que al ser humano le otorgan felicidad. Esto le servirá para hablar en torno a los tics que podemos tener, a las costumbres o manías que nos identifican, a nuestras debilidades…Elementos todos ellos con los que cualquier lector puede sentirse identificado.