Un interrogatorio es una serie de preguntas. El término procede del latín interrogatorius y está vinculado al verbo interrogar (preguntar, inquirir). Por ejemplo: «El acusado fue sometido a un extenso interrogatorio por parte del tribunal«, «No voy a tolerar un interrogatorio cuando apenas llegué diez minutos más tarde de lo previsto», «El dueño de la empresa te hará un breve interrogatorio antes de decidir tu contratación».
Interrogatorio también es el documento que contiene preguntas o el acto de dirigir dichas preguntas a quien las debe contestar: «El juez envió el interrogatorio al empresario sospechado de evasión impositiva y le otorgó un plazo de diez días para contestarlo», «El interrogatorio se inició a las diez de la mañana y aún continúa», «Ya respondí al interrogatorio de las autoridades, y creo no tener nada que agregar».
Interrogatorio como careo
En ocasiones, interrogatorio se utiliza como sinónimo de careo. Se trata de una figura del derecho que complementa la prueba testifical y que, por lo tanto, actúa como medio de prueba complementario.
El careo permite que el juez o el tribunal aclaren las contradicciones de los intervinientes en un proceso penal y puede consistir en el interrogatorio directo y presencial o en la presentación de un escrito.
El término en el lenguaje coloquial
En el lenguaje cotidiano, se conoce como interrogatorio a cualquier sucesión de preguntas.
Por lo tanto, si una persona somete a otra a un interrogatorio, se establece cierta relación de jerarquía o de subordinación, ya que quien realiza las preguntas está (o se siente) facultada para exigir las respuestas.
El método Reid para realizar interrogatorios
A continuación se presentan los nueve pasos descritos por la compañía norteamericana John E. Reid and Associates, la cual ofrece cursos de formación a los profesionales que se dedican a realizar interrogatorios en busca de información que la persona interrogada pretenda ocultar. Se trata de un proceso que consiste en desequilibrar los mecanismos de respuesta racionales.
Para dar con el método Reid, fueron necesarios más de cinco décadas de investigación exhaustiva y actualmente es el preferido por los expertos de todas partes del mundo.
1) Confrontación: se comunica a la persona, directa o indirectamente, que existe suficiente evidencia para acusarlo de un crimen. No importa si esto es cierto; lo esencial es expresarse con total certeza, creyendo las propias palabras al pie de la letra;
2) Desarrollo del tema: se busca la complicidad del entrevistado, para lo cual es necesario ponerse de su lado, minimizar su supuesto delito. Es común acusar a un tercero, e intentar demostrar que el crimen es relativamente comprensible, para obtener rápidamente la confianza del sujeto;
3) Interrupción de negaciones: se le impide al acusado justificar sus acciones, declararse inocente. Se trata de uno de los pasos fundamentales, ya que ataca directamente la fuerza de su defensa;
4) Superación de objeciones: la persona interrogada comienza a explicar por qué no cometió el crimen del cual se lo acusa, dando razones que lo alejan de un comportamiento tal (por ejemplo, «nunca robaría dinero, ya que tengo más del que necesito para mantenerme durante el resto de mi vida»);
5) Acaparar la atención del sujeto: se busca entablar un lazo con el sujeto a través de una actitud supuestamente comprensiva y sincera. El objetivo es disminuir sus defensas, haciéndole pensar que no está solo, que tiene el apoyo de quien lo interroga;
6) Potencial quiebre del sujeto: es posible que en este momento el interrogado se desmorone y comience a llorar, pero es imprescindible no mostrar empatía ni detener el interrogatorio. Se pueden usar frases como «me alegro de su llanto, porque demuestra que está arrepentido»;
7) Pregunta alternativa: se realiza una pregunta con dos posibles respuestas, una de las cuales debe ser más aceptable a nivel social que la otra, pero ambas deben asumir la culpabilidad del sujeto. Por ejemplo, «¿fue todo idea suya o se sintió acorralado?»;
8) Desarrollo de la confesión verbal: si no ha confesado en el paso anterior, es probable que si ve su coartada destruida por el interrogatorio, confiese en este momento. Se le debe permitir exteriorizar todo lo ocurrido;
9) Declaración escrita: se escribe la confesión previamente grabada.