Principio holográfico es la denominación que recibe una idea, teoría o interpretación que fue promovida en la década del ’90 por dos especialistas en física teórica: el estadounidense Leonard Susskind y el neerlandés Gerardus ‘t Hooft. También Stephen Hawking, acompañado por Thomas Hertog, trabajaron a lo largo de dos décadas en una teoría cosmológica que indica que el universo, tras el Big Bang, se constituyó como un holograma de enorme complejidad.
En temporadas recientes, científicos de origen italiano se focalizaron en el principio holográfico para avanzar en el análisis de los agujeros negros. De acuerdo a su investigación, es posible trabajar con estos cuerpos como si fuesen un holograma (es decir, una imagen que se consigue gracias a la técnica de la holografía) desde una perspectiva tridimensional aunque su esencia sea bidimensional. Según su criterio, los citados agujeros negros pueden representarse teniendo en cuenta la base del principio holográfico, el cual señala que, en cierta zona del espacio, el comportamiento propio de la gravedad (al llegar a desaparecer sustancialmente) puede reflejarse con un sistema que presente una dimensión menos. No se descarta que, a mediano plazo, con telescopios espaciales más avanzados y tecnología de última generación, este flamante enfoque pueda ser aplicado sobre la gravedad cuántica.
En opinión del experto en física Roberto Amparan, si bien restan demostraciones y pruebas, no habría que descartar que sea cierta la hipótesis del principio holográfico. Al respecto, en declaraciones a la prensa este perito explicó que desde hace años este principio ha surgido, y sobrevive, en un contexto relacionado a una teoría cuántica de la gravedad que reúne a la física cuántica con la gravedad y que, a su vez, se enlaza a la teoría de cuerdas y a la de supercuerdas.
Más miradas sobre el principio holográfico
Son varios los científicos de distintas nacionalidades que, en distintas épocas, han tenido en consideración al principio holográfico. Por ese motivo, tras haber aludido a los aportes de varios investigadores vale la pena compartir más miradas sobre el principio holográfico.
Es necesario, en este marco, exaltar la figura del argentino Juan Maldacena, el físico teórico detrás del análisis y desarrollo de la dualidad AdS/CFT, conocida asimismo como conjetura de Maldacena o correspondencia AdS/CFT. En ella, que apunta a la conexión entre el espacio-tiempo de Anti-de Sitter (AdS) y la teoría de campos conforme (CFT), consigue relevancia el principio holográfico.
Valiéndose de computadoras con el objetivo de comprobar parte de las afirmaciones o posturas de esta conjetura, un grupo de científicos japoneses ha realizado un cálculo matemático: ahora restan más predicciones que conduzcan a la demostración que dé certezas en cuanto al carácter de holograma que podría tener nuestro universo.
De igual modo es justo detenerse en los estudios efectuados por Stephen Hawking y Jacob David Bekenstein. Gracias a ellos es posible instruirse acerca del límite o frontera Bekenstein (límite que se vincula al principio holográfico y a la termodinámica de los agujeros negros). Esta frontera sirve para demarcar el nivel de información capaz de almacenarse en el interior de un volumen esférico a la entropía de un determinado agujero negro que presenta idéntica superficie. Así entra en juego la denominada entropía de Bekenstein-Hawking (cuya ecuación para agujeros negros de perfil tridimensional, abarcando al horizonte de eventos entre otras variables, termina saturando el límite de Bekenstein), la cual indica cuánta entropía se le asigna a un cierto agujero negro a fin de hacer cumplir las leyes de la termodinámica.
Aplicaciones y alcances
El principio holográfico, que lleva décadas captando el interés y la atención de científicos desde la teoría, ha logrado sumar aplicaciones y alcances con el correr del tiempo.
Hace algunos años, especialistas nucleados en la Universidad Técnica de Viena sugirieron que este principio puede sostenerse y adaptarse a un espacio-tiempo plano como nuestro universo, el cual, en materia de distancias astronómicas, posee una curvatura positiva.
En el ámbito de la Física, el principio holográfico constituye una herramienta de base matemática nacida de una serie de conjeturas para sugerir que el universo puede ser considerado como un holograma. Con esta visión se han ido analizando el Big Bang y los agujeros negros, por ejemplo.
Dicen los expertos en cuestiones astronómicas y cosmológicas que es imprescindible contar con una combinación categórica de la teoría de la relatividad general (útil para la descripción del universo pero a una escala grande) y la mecánica cuántica. Una vía para conjugarlas es, según se ha asegurado públicamente, intentar asumir el carácter holográfico de la gravedad. Aprovechando los saberes que se desprenden de la teoría de cuerdas se está más cerca de reconstruir el proceso de constitución de la materia y la energía. Si bien se ha progresado mucho en cuanto a hallazgos científicos que contribuyen a dar respuesta a numerosos interrogantes, queda todavía bastante para investigar y probar a fin de, por ejemplo, confirmar si se cumple, o no, el postulado del principio holográfico.