Refinado es un adjetivo que puede aplicarse de distintas maneras. Puede tratarse de aquello que se destaca por su fineza o delicadeza. Por ejemplo: “La modelo lució un refinado vestido de color rosa con sombrero y guantes blancos”, “Es un joven muy refinado que se educó en el mejor colegio de París y ahora cursa un posgrado en Harvard”, “La banda sorprendió con un sonido refinado, alejado de las estridencias y de la distorsión”.
Lo refinado, en este sentido, suele asociarse a la elegancia y la distinción. Una persona refinada se viste siguiendo los parámetros de la moda, es educada y cuenta con una vasta cultura.
Aprender a ser refinado
Hay quienes piensan que el ser alguien refinado es una “cualidad” con la que se nace. No obstante, hay otros que son de la opinión de que eso es algo que se puede lograr siguiendo una serie de consejos fundamentales:
- Hay que hablar pausadamente, con cordura y nunca utilizando insultos o groserías.
- Se debe pensar antes de hablar.
- No hay que chismorrear.
- En todo momento hay que hacer uso de buenos modales.
- La diplomacia es un instrumento que debe utilizarse.
Un tipo de producto
Un producto refinado, por otra parte, es el resultado de un proceso de refinación. Al refinar algo (una tarea que se desarrolla en instalaciones conocidas como refinerías), se le confiere una mayor pureza ya que se separan residuos y diversas clases de partículas.
El petróleo refinado, por lo tanto, es aquel que ya ha sido sometido a algún tipo de tratamiento y que, gracias al mismo, puede comercializarse de distintas maneras. Antes de la refinación, la sustancia en cuestión era petróleo crudo.
Riesgos los alimentos refinados
Dentro de la alimentación de cualquier persona hay que tener en cuenta que existen numerosos productos que tienen la categoría de refinados. Una circunstancia que no está nada recomendada ni por médicos ni por expertos en nutrición ya que se considera que los artículos que ingerimos con esa característica traen consigo una serie de consecuencias que no resultan beneficiosas para el organismo:
- Disponen de conservantes, aditivos o potenciadores de sabor que no son nutrientes.
- No aportan ningún tipo de fibra, que es fundamental que sea ingerida a la hora de evitar problemas de estreñimiento o incluso intestinales en general.
- Provocan que la persona que los tome dé a su cuerpo una gran cantidad de calorías.
- Carecen de minerales y vitaminas que son necesarios para el organismo.
Algunos ejemplos
El azúcar refinado es una sustancia química que se obtiene a partir de la refinación del azúcar natural. Para esto se apela al intercambio de iones y a la fosfatación, entre otras técnicas.
El aceite de oliva, por su parte, puede refinarse cuando el aceite virgen no resulta idóneo para el consumo. Esto quiere decir que el aceite de oliva refinado no es obtenido a partir del prensado mecánico de las aceitunas, sino que a ese aceite virgen se lo somete a distintos tratamientos para reducir su acidez, modificarle el color y el aroma y eliminar ciertas sustancias.
Este tipo de aceite, el refinado, es fruto de que se acometan una serie de procesos tales como la depuración, la neutralización, la decoloración, la desodorización y la winterización. De esta manera, al obtenerse este se identificará por ser una grasa insípida, incolora e inodora.