El término francés truand llegó a nuestro idioma como truhán. El concepto también puede emplearse con acento en la U y, por lo tanto, sin tilde.
Se trata de una adjetivo que califica a un individuo que carece de ética y cuya moral es cuestionable. Por ejemplo: “¡Eres un truhán! Devuélveme la ropa que me has robado”, “No te juntes con ese truhán: tendrás problemas”, “Cuando era chico actuaba como un truhán, pero luego enderecé el rumbo”.
Ejemplos de truhán
Tomemos el caso de un hombre que se dedica a estafar a las personas como método de subsistencia. Este individuo, cada mañana, se maquilla un ojo para simular que recibió un golpe y se acerca a los transeúntes para pedirles dinero, argumentando que acaba de ser asaltado. La gente, conmovida, suele demostrar su solidaridad y le entrega billetes y monedas. Ante esta conducta basada en el engaño, podría decirse que el hombre es un truhán.
El diccionario de la Real Academia Española (RAE) reconoce otra acepción de truhán: la noción puede aplicarse a quien que, apelando a morisquetas, bromas y chismes, intenta divertir a los demás. Un joven que, en un bar, inventa historias y realiza imitaciones para entretener a los parroquianos, puede ser calificado como un truhán.
El término en la música
Dentro del ámbito musical también tiene su protagonismo la palabra que nos ocupa. Buena muestra de eso es una de las canciones más emblemáticas del afamado artista español Julio Iglesias. Nos estamos refiriendo a la composición “Soy un truhán, soy un señor”, que escribieron para él los integrantes del conocido Dúo Dinámico, Manuel de la Calva y Ramón Arcusa.
En el año 1977, dentro del álbum “A mis 33 años”, fue cuando se presentó esa canción que fue realizada a petición del propio cantante para que a través de la misma la gente pudiera conocerle un poco más.
Una canción esa que precisamente catapultó a la fama a un grupo de actores cómicos catalanes llamado Tricicle. La versión “mimo” que realizaron de la misma en un programa de enorme éxito, como era el concurso de televisión “Un, dos, tres…responda otra vez”, les hizo convertirse en un verdadero fenómeno en España en la década de los años 80.
El concepto de truhán en el cine
En el ámbito del cine, podemos destacar la producción “El truhán y su prenda”. Se trata de un largometraje de 1980, dirigido por Walter Bernstein y protagonizado por Walter Matthau y Julie Andrews. Es una comedia que cuenta cómo un corredor de apuestas sin escrúpulos un día decide aceptar como prenda de un apostador sin dinero a su hija de seis años. Lo que sucederá es que, poco a poco, se irán cogiendo cariño y comenzarán a tener una relación de amistad.
“Truhanes”, por otra parte, es el título de un filme dirigido por el español Miguel Hermoso que se estrenó en 1983 y que una década más tarde tuvo una adaptación televisiva. Tanto la película como la serie contaron con el protagonismo de Arturo Fernández y de Francisco Rabal.