Para poder adentrarnos en el significado del término advenedizo, debemos comenzar por conocer lo que es su origen etimológico. En este caso, hay que subrayar que deriva del latín, que significa “el que no es de este lugar” y que es fruto de la suma de varios componentes:
-El prefijo “ad-”, que es equivalente a “hacia”.
-El verbo “venire”, que puede traducirse como “venir”.
-El sufijo “-izo”, que se usa para indicar relación o pertenencia.
Advenedizo es un adjetivo que deriva de advenir: arribar, llegar o acontecer. El término se emplea para calificar a la persona que no es nativa o natural de un determinado sitio. Por ejemplo: “Nuestra asociación no tolerará la llegada de un advenedizo con intenciones de mando”, “Quiero que todos los ciudadanos sepan que no soy un advenedizo: tengo una carrera de más de treinta años en la fuerza policial”, “No soporto a los fanáticos advenedizos que ahora quieren ir a todos los conciertos de la banda”.
Por lo general, este adjetivo se utiliza con un sentido despectivo o peyorativo. Supongamos que un actor se involucra en la actividad política y lanza su candidatura a alcalde de su pueblo. Los dirigentes más experimentados de la localidad no tardan en acusarlo de ser alguien advenedizo que no tiene experiencia en este tipo de cuestiones y que, por lo tanto, no debería recibir el apoyo de los vecinos.
También se le dice advenedizo a aquel que nació en la pobreza y que, después de lograr juntar una cierta riqueza, desea mostrarse como integrante de la clase alta de la sociedad. Un advenedizo o nuevo rico es alguien que, desde que dispone de los medios económicos para acceder a bienes o servicios que antes le resultaban inaccesibles, intenta mostrar su fortuna y hace ostentación de su poder económico.
Es probable que aquellos que nacieron en familias adineradas y que tienen raíces aristocráticas se burlen del nuevo rico, considerando que, más allá del dinero que reunió, sigue siendo una persona vulgar que no tiene el mismo estatus que ellos. Así lo tildan de advenedizo y no le permiten “ingresar” al sector privilegiado de la comunidad.
En el mundo del cine, del teatro o directamente de la historia nos encontramos con numerosos ejemplos de advenedizos. Nos estamos refiriendo, por ejemplo, al personaje de Trimalcion, en la novela satírica “El Satiricón”, que está escrita en latín y cuya autoría se atribuye a Petronio.
También recibe ese adjetivo Molly Brown, una filántropa estadounidense que luchó en vida de manera activa por los derechos de las mujeres, de los mineros de Colorado y también de los niños. Se dio a conocer por ser una de las supervivientes del Titanic y se estableció que era una nueva rica. Sus orígenes habían sido muy humildes, pero logró amasar una gran fortuna gracias a, en compañía de su marido, haber descubierto una mina de oro.
Precisamente otro nuevo rico puede ser el español Amancio Ortega, ahora convertido en uno de los empresarios más acaudalados de todo el mundo gracias a ser propietario del grupo textil Inditex. Y es que este hombre, de origen humilde, comenzó su carrera profesional trabajando en tiendas de ropa y luego poniendo en marcha un pequeño negocio de confección de albornoces.
