Se llama alegría a la emoción o el sentimiento que se experimenta cuando algo provoca felicidad o júbilo. Lo habitual es que la alegría se exteriorice mediante gestos, acciones o palabras.
Por ejemplo: “¡Qué alegría! Mi hijo aprobó el examen y logró graduarse”, “Me dio mucha alegría verte, tenemos que encontrarnos más seguido”, “Pocas cosas me provocan tanta alegría como un kilo de helado”.
La alegría como estado anímico
Puede considerarse la alegría como un estado anímico. Cuando una persona tiene alegría, se siente plena ya que vive un momento agradable o placentero. Por eso puede decirse que los seres humanos desarrollan una tendencia a realizar aquello que, de una forma u otra, les provoca alegría. Esto también puede apreciarse en los animales.
Tener la posibilidad de compartir de una cena en familia, por citar un caso, puede darle alegría a un padre. Dicha acción genera bienestar por sí sola. Trabajar ocho horas por día, en cambio, puede resultar tedioso o agobiante, aunque si dicho trabajo brinda la posibilidad de gozar de una buena posición económica, contar con el empleo en cuestión también supondrá una alegría.
Lo contrario a la alegría es la tristeza. Se puede comprender la oposición entra ambas nociones en múltiples situaciones. Supongamos que se enfrentan Real Madrid y Barcelona en un partido de fútbol. Un simpatizante del conjunto catalán puede experimentar alegría si su equipo consigue el triunfo, o tristeza si pierde.
Impacto positivo en la salud
Se ha demostrado que la alegría tiene efectos positivos para la salud. Cuando un individuo se siente feliz, el cerebro libera endorfina, una hormona que incrementa la fortaleza del organismo y minimiza los dolores.
El estrés también es una de las condiciones que se oponen a la alegría y que, por lo tanto, nos vuelve más débiles e intensifica los dolores. Si bien es cierto que ambos extremos pueden aparecer como consecuencia de situaciones difíciles o imposibles de controlar, a veces todo depende de la voluntad del individuo de evitar por todos los medios las obligaciones abrumadoras y las fechas de entrega demasiado exigentes.
Ir en busca de la alegría
En otras palabras, la alegría es algo que debemos perseguir y procurarnos a cada paso, en lugar de esperarla de forma pasiva.
Se trata de un compromiso con nosotros mismos que nunca deberíamos desatender, ya que las ventajas de estar alegre son innegables y también afectan a los que nos rodean: la alegría nos vuelve más productivos y nos pone en un estado en el cual la vida parece tener más sentido, de manera que nuestros objetivos son más prometedores.
Una escritora nicaragüense
Claribel Alegría es una escritora nacida en Nicaragua en el año 1924, autora de obras que abarcan varios géneros, entre los que se encuentra la poesía, el ensayo y la novela. Además de su propia producción, también ha traducido libros de poesía de varios autores ingleses, como ser Robert Graves. Con respecto a las características de su escritura, puede decirse que se enfoca en el compromiso con la realidad de su época, sin dejar de lado la situación política y sus implicaciones en la vida del pueblo.
Existen varias obras, principalmente musicales, que llevan el término alegría en sus títulos, como ser las siguientes: el poema «Oda a la Alegría«, escrito en el siglo XVIII por el autor alemán Friedrich Schiller; el «Himno Europeo«, que representa al Consejo de Europa y a la Unión Europea, a menudo se asocia con esta palabra; una canción llamada «Himno a la Alegría«, del cantante y compositor español Miguel Ríos; dentro de la Sinfonía nº 9 de Beethoven, el cuarto movimiento se conoce como «Himno de la alegría«; la novela de José García Illa llamada «Un himno a la alegría«.