El recorrido etimológico de algazara se inicia en el árabe clásico ḡazārah, que puede traducirse como “abundancia”. Dicho vocablo pasó al árabe hispánico como alḡazara, vinculado a la “locuacidad”.
Se llama algazara al bullicio o el clamor que se produce por satisfacción o alegría. La algazara puede provenir de una persona o de un grupo de individuos.
Por ejemplo: “Apenas ingresamos al parque de diversiones pudimos sentir la algazara de los niños”, “La noticia produjo algazara en el estadio”, “La algazara propia de la época navideña siempre me genera una gran felicidad y me transporta a mis días de infancia”.
Otro significado de algazara que recoge la Real Academia Española (RAE) refiere al griterío de las tropas cuando atacan. Una acepción en desuso del concepto, en tanto, alude a la algara: la caballería que se encargaba de saquear los terrenos del bando enemigo.
Este término se parece a algarabía desde el punto de vista de su escritura, y de hecho se considera uno de sus sinónimos. En este sentido, por lo tanto, debemos entender que su connotación es positiva, ya que esta forma de expresarse la exhibimos cuando mejor nos sentimos, cuando estamos contentos por nuestros logros o por estar en compañía de nuestros amigos.
Antes de pasar a evaluar sus antónimos, veamos otro sinónimo: alborozo, un sentimiento de alegría o regocijo que resulta fuera de lo común. También solía usarse para expresar un «desorden de raras proporciones», pero en la actualidad solamente tiene vigencia la acepción anterior. Si nos fijamos en el matiz de «extraordinario» que nos proporciona este término, podemos inferir que la intensidad de los sentimientos que evidencian quienes se comportan con alborozo es mayor que la de la algarabía.
Este último se enfoca más en la confusión generada por los gritos y la energía que emanan varias personas en un momento de alegría y despreocupación. Por lo tanto, podemos decir que uno de los antónimos más adecuados para algarabía es tranquilidad, mientras que alborozo se opone con mayor precisión a tristeza. Ambos funcionan como antónimos de algazara, y de este modo podemos entender el alcance de sus significados.
“Algazara”, por otra parte, es un disco doble de la banda española Reincidentes que registra canciones grabadas en vivo. Se trata del octavo álbum del grupo y llegó a convertirse en Disco de Oro, con ventas de más de sesenta mil copias.
Algazara también es el nombre de una editorial española. “La campaña de Cochinchina” de Francisco Gaínza, “Antequera a fines del siglo XV” de Manuel Pérez Gallego y “La vivienda marroquí (Notas para una teoría)” de Alfonso de Sierra Ochoa son algunas obras publicadas por este sello.
En la serie japonesa Yo-kai Watch, que incluye varios videojuegos para más de una plataforma y una serie de dibujos animados, el término algazara le da nombre a uno de sus personajes. Se trata precisamente de un Yo-kai, un tipo de criatura similar a un espectro que pertenece al folclore de Japón. Algazara se caracteriza por su gran boca de color violeta, con tan sólo cuatro dientes de color negro. Con respecto a su vestimenta, luce ropa tradicional japonesa y un moño en la cabeza.
Cabe señalar que Algazara es un personaje femenino, capaz de absorber toda la diversión y la alegría de una escena y quedársela para ella misma, privando a los demás de disfrutarla. Para encontrarla, el personaje principal debe usar su lente especial a lo largo del día y observar los árboles de la Colina Rosquilla, en las Cumbres Floreadas.
El Club Baloncesto Algazara, por último, es una institución malagueña. Los colores que identifican a sus equipos son el blanco, el negro y el rojo.
