Los arcontes griegos llegaron a ocupar la posición política más elevada de Atenas.
Arconte es un término que procede del latín archon, a su vez derivado del griego árchōn. De acuerdo al diccionario de la Real Academia Española (RAE), así se denominaba a los diversos magistrados que, luego del fallecimiento del rey Codro, dirigieron los destinos de Atenas.
TemasCodro
Codro vivió entre los años 1089 y 1068 antes de Cristo. Hasta su mandato, los máximos gobernantes atenienses eran denominados basileos. Fallecido este monarca, a modo de homenaje se decidió que ningún otro dirigente tuviera el mismo título, con lo cual surgió la denominación de arconte.
Los arcontes
Los arcontes, por lo tanto, eran gobernadores griegos. Es importante tener en cuenta que el poder de los arcontes fue cambiando con el correr de la historia, aunque esta institución se mantuvo en vigencia durante cerca de medio milenio.
A nivel general, puede decirse que un arconte era una autoridad de una ciudad griega. En el caso de Atenas, en un primer momento convivían tres arcontes: el arconte polemarca (con mando militar), el arconte basileus (concentrado en los asuntos religiosos) y el arconte epónimo (a cargo de administrar las cuestiones civiles y la jurisdicción pública).
Más adelante se pasó de tres a nueve arcontes. Los tres arcontes principales contaban el acompañamiento de otros seis, conocidos como tesmótetas. Finalmente se incorporó un secretario, con lo cual se alcanzó la decena de arcontes.
Arconte polemarca
Se trata del título que recibía un alto comandante del ejército de la Antigua Atenas. En la recordada batalla de Maratón, que tuvo lugar en el año 490 a. C. en la ciudad homónima y fue determinante para la Primera Guerra Médica, ya estaba en vigor este cargo para ocuparse del ala derecha de la organización táctica.
Pasó el tiempo, y el arconte polemarca pasó de tratar temas de carácter militar para hacerse cargo la superintendencia de residentes extranjeros, algo que en la antigua Roma estaba en manos de los pretores peregrinos. Por último, podemos mencionar que todos los años debía ofrecer un sacrificio a la diosa Artemisa para conmemorar el voto del polemarca Calímaco en la batalla de maratón en homenaje a los caídos.
Arconte basileus
Continuando con una visión centrada en la antigua Grecia, el arconte basileus surgió sobre el final de la monarquía. Si bien casi todos sus poderes ya estaban en manos del Areópago, entre otras instituciones, este arconte gozaba de la posición política más elevada de Atenas, y la compartía con el polemarca y el epónimo. Su obligación específica era la supervisión de los ritos de carácter religioso.
Los primeros eran elegidos cada década y debían pertenecer a la aristocracia de Atenas. A partir del año 683 a. C., sin embargo, el cargo comenzó a durar tan sólo un año: hasta 487 a. C., entre los de mayor poderío económico; después de tal fecha, por sorteo.
Arconte epónimo
De acuerdo con la constitución de Atenas, se encargaba de la jurisdicción pública y la administración civil. Cuestiones como la horfandad, la viudez y los litigios familiares se encontraban entre sus especialidades. Asimismo debía nombrar mecenas para el ámbito del teatro. Cabe mencionar que el nombre de cada arconte epónimo suele aparecer en las narraciones de carácter histórico como elemento de datación.
Escultura de la diosa Artemisa, a quien cada año el arconte polemarca le ofrecía un sacrificio
Otras acepciones
Es importante mencionar que, en el Imperio bizantino, también hubo arcontes. En este caso el concepto podía aludir a distintos administradores, nobles y gobernantes.
El Arconte Desconocido, en tanto, es la denominación que se le suele dar al hombre que, a comienzos del siglo VII, lideró a los sorbios (serbios blancos) desde el noreste de Europa Central hasta la península de los Balcanes.
Por último, se llama arconte a un ser mitológico o celestial que se dedica a la protección de las personas por indicación de una deidad.
