Se conoce como bellas artes al conjunto de disciplinas que persiguen la expresión de lo bello. La música, la escultura y la pintura forman parte de este grupo, que comenzó a considerarse de este modo a partir del siglo XVIII.
Puede decirse que las bellas artes apelan a la búsqueda de la belleza, la utilización de la estética y el dominio de la técnica. El francés Charles Batteux, en un libro que publicó en 1746, fue el primero en usar la denominación de bellas artes. Para él, la música, la escultura, la pintura, la danza, la poesía, la elocuencia y la arquitectura formaban parte de las bellas artes.
El concepto de bellas artes a lo largo de la historia
Con el correr de los años, el listado ha ido mutando de acuerdo a la concepción de distintos teóricos. La elocuencia, por ejemplo, ya no está considerada como una de las bellas artes. En cambio, se suele llamar al cine como el séptimo arte.
En la actualidad la noción de bellas artes se usa principalmente en instituciones, asociaciones y museos que están orientados a las artes plásticas. De este modo, ya no suele vincularse a la música, la danza y la poesía a esta idea.
Una clasificación muy usada indica que las bellas artes son las artes superiores: las disciplinas que pueden apreciarse a través del oído o de la vista, sin la necesidad de establecer un contacto físico directo. Partiendo de esa premisa se establece que las bellas artes o artes superiores son la arquitectura, la escultura, la danza, la pintura, la música, la literatura así como el cine y el teatro.
En cambio, las artes menores son captadas por el tacto, el olfato y el gusto. En este conjunto ingresan la perfumería y la gastronomía.
La noción en museos y en la educación
Además de todo lo indicado, no podemos pasar por alto la existencia de numerosos museos que llevan el “apellido” de Bellas Artes. Entre los más relevantes podemos destacar el Museo de Bellas Artes de Sevilla. En la primera mitad del siglo XIX tiene su origen este lugar, que se considera que es una de las pinacotecas más grandes e importantes de España.
En concreto, ese museo es una estupenda propuesta para poder descubrir no solo la pintura andaluza del siglo XIX sino, sobre todo, la pintura barroca sevillana. Y es que en su colección cuenta con espectaculares trabajos de Valdés Leal, Bartolomé Esteban Murillo o Francisco de Zurbarán. Entre sus obras más importantes están “Don Cristóbal Suárez de Ribera” de Velázquez o la “Inmaculada Concepción Grande” del citado Murillo.
Dentro del ámbito educativo, tenemos que exponer la existencia en España de lo que se conoce como grado de Bellas Artes. A través del mismo se consigue que el alumno pueda formarse como artista plástico así como en profesional del diseño y de las nuevas tecnologías. De esta manera, adquirirá conocimientos y desarrollará sus habilidades artísticas que le pueden llevar a convertirse en un importante artista dentro del mundo de la fotografía, la pintura, la escultura, el dibujo, el cómic, el vídeo, los videojuegos…