Un catalejo es una herramienta óptica portátil que puede extenderse de acuerdo a la necesidad del usuario. Se trata de un tipo de anteojo monocular: un tubo con una lente en su extremo que incrementa el tamaño de las imágenes de aquellas cosas ubicadas lejos.
Se cree que el inventor del catalejo fue el alemán Hans Lippershey (1570-1619), quien partió de desarrollos teóricos de otros científicos para construir el primer telescopio de utilidad práctica. Lippershey, de todos modos, no obtuvo la patente del invento. Basándose en el trabajo del alemán, Galileo Galilei finalmente logró mejorar el telescopio (que es un instrumento equipado con espejos o lentes para agrandar la imagen de un elemento situado a gran distancia).
Los primeros catalejos fueron utilizados por los naturalistas para observar especies y por los marinos para tratar de avistar tierra. Con el tiempo comenzaron a usarse en otras observaciones, incluso en el campo de la astronomía.
Además de lo expuesto, no podemos pasar por alto que existen fundamentalmente dos tipos de catalejos:
-Los catalejos de techo. También responden al nombre de lineales y reciben esta denominación porque cuentan con prismas lineales y lentes de objetivo. Tienen la ventaja de que por tamaño y peso resultan ser muy prácticos para llevar de viaje como parte del equipaje. Y es que son estupendos a la hora, por ejemplo, de realizar viajes para poder descubrir la belleza de distintos parajes naturales.
-Los catalejos de porro, que tienen la particularidad de que utilizan lo que son lentes triangulares. Ofrecen una visión no lineal. Al contrario que los primeros, son mucho más pesados y necesitan ser utilizados haciendo empleo de un trípode. Dadas estas características y otras muchas más hay que destacar que se convierten en la mejor opción para disfrutar de una visión panorámica de grandes distancias. De la misma manera, este tipo de catalejo es el idóneo para llevar a cabo lo que son observaciones astronómicas.
Las principales características de los catalejos son su diámetro y su grado de aumento. Los lentes de mayor diámetro permiten captar más luz y, de este modo, ofrecen imágenes más luminosas. El grado de aumento, por su parte, alude a las posibilidades de acercamiento que brinda el catalejo. Generalmente este grado se menciona mediante un multiplicador, como 10x o 20x.
A la hora de adquirir un catalejo hay que tener en cuenta tres aspectos significativos:
-El uso que se le vaya a dar. Y es que en base al empleo que se le quiera otorgar habrá que optar por comprar un tipo u otro.
-El diámetro de su lente, ya que mientras más grande sea ese captará más luz y, por tanto, permitirá obtener una imagen mucho más luminosa.
-El grado de aumento que ofrece porque así se podrán tener unas imágenes u otras con más detalles y proximidad.
En la actualidad, el uso de los catalejos trasciende al ámbito de la ciencia. En muchos sitios turísticos se instalan catalejos para que los visitantes puedan disfrutar de vistas panorámicas o intenten lograr el avistamiento de animales que, a simple vista, son difíciles de detectar.