Lo primero que vamos a determinar es que cigüeñal es un término que procede de la palabra latina “ciconia”.
El cigüeñal, también llamado cigoñal, es un eje que dispone de codos y que, gracias a un mecanismo de biela, logra convertir un movimiento circular uniforme en un movimiento rectilíneo alternativo y viceversa.
Tiene su origen en un mecanismo antiguo que se utilizaba para poder sacar agua de los pozos que tenían poca profundidad. En concreto, era un sistema que se sustentaba en una especie de pértiga que disponía de un contrapeso con la que se conseguía la fuerza necesaria para proceder a elevar el agua y así poder disfrutar de la misma.
Podemos comprender qué es un cigüeñal analizando los distintos términos que forman parte de la mencionada definición. Un eje es una barra que funciona de sostén de un cuerpo giratorio cuando hay un movimiento. El mecanismo o juego de biela, por su parte, alude al engranaje que transforma un movimiento de traslación en un movimiento circular, o un movimiento circular en un movimiento de traslación.
Teniendo en cuenta estos detalles, podemos afirmar que el cigüeñal es una barra acodada que, interactuando con otros componentes de una máquina, permite la transformación de un movimiento rectilíneo en circular (o al revés).
Por lo general los cigüeñales se realizan con aleaciones muy resistentes, ya están sometidos a un esfuerzo de gran intensidad. Muchas veces cuentan con conductos y perforaciones por donde circula una sustancia lubricante.
Los motores de combustión interna que utilizan los automóviles disponen de un cigüeñal. Con el motor en funcionamiento, el combustible ubicado en la cámara de combustión provoca una explosión que mueve el pistón de manera lineal. Dicho movimiento es transmitido a una biela que está unida al pistón y al cigüeñal. Cuando el movimiento llega al cigüeñal, éste lo transforma en un movimiento rotatorio o circular. Los contrapesos y los volantes del cigüeñal permiten minimizar las irregularidades que se generan en el movimiento del eje.
En más de una ocasión te ha podido suceder que te hayas encontrado con un problema en tu coche debido al mencionado cigüeñal. Un problema serio ya que este elemento es una pieza clave del motor del vehículo. En concreto, entre las averías más frecuentes que puede experimentar se encuentran las siguientes:
-Se ha producido un rayado de lo que son las muñequillas, que se encuentra en relación con el filtrado del aceite e incluso con la lubricación. Las causas de esta situación pueden ser varias tales como que el lubricante no está haciendo su labor adecuadamente, que se ha viajado a plena carga con muy pocas revoluciones, que se han realizado acelerones estando el motor aún demasiado frío…
-El cigüeñal se ha roto por fatiga. Esta otra avería, que requiere llevar el coche al taller sin ninguna duda, puede tener lugar porque el citado cigüeñal no está bien equilibrado, porque se han producido vibraciones por torsión o incluso porque un cilindro se ha encendido de la manera no adecuada.