Un compás es un instrumento que cuenta con un par de brazos articulados, los cuales están vinculados entre sí mediante un eje o una bisagra en su sector superior. Con un compás es posible registrar distancias y dibujar arcos o círculos.
Por lo general, el compás presenta una punta en el extremo de uno de sus brazos y un lápiz en la punta del otro brazo. De esta manera, el usuario clava la punta sobre el papel y luego separa ambos brazos de acuerdo al radio de la circunferencia que pretende trazar. Finalmente, con un movimiento, hace que el lápiz se desplace sobre el papel para dibujar el círculo con las características deseadas.
El compás plano
El compás plano es un aparato en el cual se fusionan cuatro instrumentos geométricos en uno: la regla, la escuadra, el transportador y el compás descrito en el párrafo anterior. Gracias a su versatilidad no es necesario pasar de uno a otro cuando deseamos trazar figuras geométricas sobre una hoja o una pizarra.
Su invención se atribuye a un profesor oriundo de México llamado Carlos Ricardo Hernández Ortiz, quien lo presentó en el año 2007 para suplir la falta de materiales en algunas escuelas de su tierra.
El concepto en la música
La noción de compás también se emplea en el ámbito de la música para referirse a la cadencia o el ritmo de una composición. El compás puede entenderse como una entidad formada por diversas figuras que se distribuyen en conjuntos, contraponiéndose las partes átonas y las partes acentuadas.
Al signo que establece los vínculos de valor entre los sonidos, o que fija el ritmo de la composición, se lo denomina compás. Lo mismo ocurre con el movimiento que se realiza con la mano para marcar, justamente, cada compás. El término, por otra parte, alude al espacio del pentagrama delimitado con rayas verticales donde se escriben las diversas notas de un compás.
De acuerdo a la cantidad de tiempos, es posible diferenciar entre los compases binarios, los compases ternarios y los compases cuaternarios. Además, según otras subdivisiones que suelen establecerse, puede hablarse de compases simples o compases compuestos.
El compás como símbolo
El compás también es uno de los símbolos de la masonería, junto con la letra G y la escuadra.
La simbología masónica es el estudio de los símbolos francmasónicos para hallar sus significados y comprender los mensajes que representan, los cuales se basan principalmente en los instrumentos que usaban los antiguos albañiles franceses. Se cree que las expresiones de la masonería solamente pueden ser comprendidas a pleno por los propios masones, y sus símbolos se pueden decodificar mediante dos sistemas, lo cual aumenta su complejidad.
La pantómetra
El compás de proporciones, también llamado pantómetra, es un instrumento que se usa para el cálculo o la resolución de problemas diversos de un modo indirecto. Se trata de una calculadora analógica que se apoya en la proporcionalidad entre segmentos.
Apareció por primera vez en el año 1555 en Francia, según una patente a nombre de Abel Foullon, quien lo llamó «holómetro». Sin embargo, se volvió popular gracias al filósofo italiano Galileo Galilei.
El compás como instrumento de navegación
Compás también es el nombre común que se le da al instrumento de navegación que permite determinar la dirección de un barco (en otras palabras, es una brújula). El punto de referencia es siempre el norte, y de este modo es posible calcular el ángulo de desviación con respecto a este punto cardinal y así deducir la posición en un mapa, combinando este dato con otros.
Dados los avances tecnológicos desde la aparición de la primera brújula, en la actualidad existen varios tipos, como ser el magnético, el giroscópico y el electrónico, cada uno de los cuales realiza los cálculos de forma diferente, además de ofrecer ventajas y desventajas con respecto a los otros.