La comunicación efectiva se logra cuando el emisor, al elaborar y difundir un mensaje, consigue que el receptor lo interprete según la intención original.
La comunicación efectiva se logra cuando un mensaje es enviado, recibido y comprendido sin que se modifique el objetivo original de quien puso en marcha el proceso comunicativo. De este modo, el significado es el mismo tanto para el emisor como para el receptor.
Cabe destacar que comunicación proviene del vocablo latino communicatio. El concepto alude al acto y resultado de comunicarse o comunicar: transmitir una señal a través de un código compartido por el emisor y el receptor.
La idea de efectiva o efectivo, en tanto, procede del latín effectīvus y refiere a aquello que dispone de eficacia. Por lo tanto, resulta capaz de conseguir el efecto esperado o deseado.
TemasQué es la comunicación efectiva
La comunicación efectiva es una consecuencia de un proceso comunicativo que se llevó a cabo con éxito. Por lo general, esa efectividad está dada por la claridad del emisor al construir y compartir el mensaje, logrando que el receptor lo reciba e interprete de acuerdo a las intenciones iniciales.
Se considera que, para que la comunicación sea efectiva, el emisor debe contar con determinadas habilidades. La elaboración del mensaje tiene que llevarse a cabo de una cierta forma, al igual que la transmisión (se tiene que establecer el código apropiado, elegir el canal adecuado, etc.).
Con una comunicación efectiva, el emisor logra transmitir lo que pretende. No solo el contenido en sí mismo, sino también las emociones y otras cuestiones simbólicas y abstractas asociadas al mensaje.
La comunicación efectiva requiere de diversas habilidades.
Su importancia
Una comunicación efectiva es importante en todos los ámbitos. Incluso en la vida cotidiana y en entornos familiares.
Por supuesto, en algunos casos se pone en marcha de un modo espontáneo o informal, mientras que en otros se requiere de conocimientos teóricos y de destrezas técnicas. No es lo mismo lograr una comunicación efectiva en un hogar que en una oficina, por ejemplo.
Si una madre quiere que su hijo ordene su habitación, tiene que ser capaz de conseguir una comunicación efectiva con su descendiente. Su misión es explicarle con claridad lo que desea y hacerle entender el por qué de la orden. Si el hijo recibe e interpreta el mensaje correctamente, lo más probable es que acepte el mandato y lo cumpla.
La comunicación efectiva es indispensable en el contexto laboral. Un jefe debe ser claro y preciso con sus empleados, así como un vendedor tiene que lograr convencer a los compradores.
En este punto, puede analizarse cuál es el alcance de la efectividad en la comunicación. Si un mensaje es comprendido pero no produce la reacción buscada, ¿se puede asegurar que fue efectivo? Retomando la mención del vendedor, es probable que el receptor haya comprendido el contenido de la comunicación pero, de todas maneras, no concrete una compra.
No se puede dejar de señalar, por último, que la efectividad se consigue de diversos modos según el tipo de comunicación. Un mensaje transmitido por una radio AM debe ser redundante ya que el receptor no tiene la posibilidad de volver atrás, a diferencia de lo que ocurre con un lector que está frente a un texto.
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