A la hora de conocer el significado del término contaminación del suelo, es necesario, en primer lugar, descubrir el origen etimológico de las dos palabras principales que le dan forma:
-Contaminación deriva del latín «contaminatio», que, a su vez, deriva del verbo «contaminare» que puede traducirse como «ensuciar» o «corromper».
-Suelo también tiene su origen en el latín. En su caso, exactamente en la palabra «solum».
Cuando mencionamos la idea de contaminación, estamos haciendo referencia al acto y el resultado de contaminar: generar, mediante agentes físicos o químicos, una alteración nociva en las características naturales o normales de algo.
Existen distintos tipos de contaminación, como la contaminación ambiental, la contaminación del aire y la contaminación del agua. En este caso vamos a centrarnos en la contaminación del suelo: la degradación de las propiedades de un terreno.
Cuando el suelo está contaminado, ya no puede ser aprovechado por el ser humano para el cultivo. Pero además el suelo tampoco puede cumplir con sus funciones naturales debido a la modificación de sus condiciones.
La contaminación del suelo puede producirse por el vertido de sustancia químicas (como plaguicidas, por ejemplo), la acumulación de sustancias radioactivas o las filtraciones de aguas servidas, por citar algunas posibilidades. Es importante tener en cuenta que el riesgo para la salud trasciende al contacto directo con el suelo contaminado, ya que la contaminación puede llegar incluso al agua subterránea.
Pruebas atómicas, la llamada tecnología agrícola e incluso el vertido de plásticos son otras de las causas que pueden provocar la contaminación del suelo. Eso sin olvidar la llamada compactación terrestre.
Entre las principales consecuencias de la citada contaminación, además de los daños que ocasiona a la salud, se encuentran algunas como estas:
-Se produce un ataque directo y contundente contra la vegetación, que irá degradándose debido a que el suelo ya no es apto.
-La consecuencia anterior traerá consigo, además, que las especies animales se vean seriamente perjudicadas. De ahí que no solo la cadena alimenticia se vea alterada de manera contundente sino que muchas especies pueden ponerse en serio.
-Afecta directamente al paisaje, que ira degradándose de forma clara y contundente.
-Se dificulta la posibilidad de que exista agua potable.
Supongamos que una planta comestible crece en un suelo contaminado. Cuando las personas y los animales ingieren esas plantas, pueden ingresar en su organismo sustancias dañinas. De esta manera la contaminación del suelo puede provocar una intoxicación, ya sea leve o grave.
Para proteger la salud de los individuos y la subsistencia de la fauna y la flora, por lo tanto, es imprescindible que los gobiernos protejan los suelos y controlen el estado de los mismos. Los suelos contaminados afectan la calidad de vida y pueden comprometer el futuro de una población.
Para poder evitar la contaminación del suelo y esas citadas consecuencias adversas es necesario que, además de la actuación de los gobiernos y administraciones, se opte por otras soluciones como el reciclaje. Y es que muchos de los artículos que acaban contaminando el suelo, como botellas o bolsas, pueden tener una nueva vida útil.