El primer paso que vamos a dar es establecer el origen etimológico del término cronológico. Al hacerlo descubrimos que emana del griego pues se encuentra formado a partir de las siguientes partes de esa lengua: el vocablo «cronos», que es sinónimo de «tiempo»; la palabra «logos», que es equivalente a «estudio»; y el sufijo «-ikos», que puede traducirse como «relativo a».
Cronológico es aquello perteneciente o relativo a la cronología (la disciplina cuyo objeto es la determinación del orden y las fechas de los sucesos históricos). La cronología forma parte de la ciencia de la historia.
La medición y la ordenación del tiempo
Todas las civilizaciones han desarrollado métodos o sistemas para medir el tiempo. Se sabe que no existe un suceso histórico que no haya surgido de otros que le precedieron y que no haya sido el origen de otros de mayor o menor importancia. El orden cronológico de los sucesos es la ubicación de éstos en una línea temporal.
Por ejemplo: la invención de la rueda, la creación de la bicicleta y la fabricación del primer automóvil son tres hechos históricos. Un orden cronológico situaría en primer lugar a la invención de la rueda (situada a finales del Neolítico, es decir, en 4.000 a.C.), en segundo a la creación de la bicicleta (finales del siglo XV aproximadamente) y en tercero a la fabricación del primer automóvil (finales del siglo XIX). Puede decirse que el primer automóvil nunca hubiera sido fabricado sin la invención de la rueda.
Cómo se establace un orden cronológico
Lo cronológico, en definitiva, está vinculado a la ordenación y medición del tiempo. Los segundos, los minutos, las horas, los días, las semanas, los meses, los años, las décadas, los siglos y los milenios son algunas de las unidades de tiempo más usuales en la vida cotidiana.
El orden cronológico puede establecerse de distintas formas. A la hora de analizar la historia, suelen utilizarse medidas amplias como las décadas o los siglos. Si queremos establecer un orden cronológico de las actividades del día, resulta más útil apelar a los minutos o las horas.
Un tipo de currículum
Precisamente en nuestro día a día, hacemos uso con frecuencia del término que ahora estamos utilizando. Así, es habitual recurrir a hablar de lo que se da en llamar currículum cronológico. Este podemos decir que es el C.V. que viene a recoger la información de una persona relativa a su formación y experiencia profesional por orden de fecha, desde la más reciente hasta la más antigua.
El hecho de que muchas personas recurran a esa clase de currículum se debe a que permite demostrar a la empresa en la que se quiere entrar a trabajar cuál ha sido la evolución de la carrera profesional que se ha tenido.
No obstante, este tipo de documento trae consigo otra serie importante de ventajas a la hora de poder conseguir un empleo. Entre ellas está el que es fácil de leer y comprender, que deja patentes de forma muy clara las funciones que se han ido desempeñando a nivel profesional, que destaca los puntos fuertes del candidato en cuestión, que es un formato que gusta mucho a los departamentos de Recursos Humanos y que permite destacar cómo la persona ha ido aumentando sus responsabilidades.