La idea de cuantía alude a una cantidad (una porción o un número). El concepto suele emplearse respecto a una medición que resulta vaga, imprecisa o indeterminada.
Por ejemplo: “La cuantía del canon que deberán pagar los restaurantes aún no ha sido definida”, “Las obras sociales pretenden que se incremente la cuantía que reciben cada mes”, “El concurso de novela anunció un aumento de la cuantía de la recompensa económica que otorga al ganador”.
Supongamos que un gobierno otorga una ayuda de 1000 pesos mensuales a los estudiantes universitarios de carreras técnicas. Si, ante una crisis económica, decide recortar esa ayuda en un 50% y pasa a entregar 500 pesos al mes, puede decirse que la cuantía fue reducida.
Tomemos el caso de una resolución que obliga a los bares a pagar un canon equivalente al 5% de sus ingresos brutos si desean utilizar el espacio público para colocar sillas y mesas al aire libre. Si las autoridades deciden incrementar dicho canon al 7% de los ingresos brutos, la cuantía a pagar por los bares crecerá.
La pensión es un pago que puede ser temporal o vitalicio a causa de una situación particular o bien de haber alcanzado el límite de edad establecido por la ley para desarrollar una actividad laboral; tomando la segunda acepción (es decir, como sinónimo de jubilación), en España su cuantía se determina tomando la base reguladora y aplicándole el porcentaje general correspondiente según el número de años que la persona haya cotizado.
Si el contribuyente accede a la jubilación habiendo excedido el límite de edad ordinario vigente, entonces también se debe aplicar el porcentaje adicional por prolongación de la vida laboral, así como el coeficiente reductor correspondiente a cada caso en particular.
También se llama cuantía a la suma de facultades o cualidades que definen a un individuo o a una cosa. Aquel o aquello de mucha cuantía, resulta valorado y relevante. Por el contrario, algo de poca cuantía, es insignificante o tiene escaso valor: “Esperamos que López se recupere pronto ya que es un jugador de mucha cuantía para el equipo”, “No pienso preocuparme por alguien de la menor cuantía”, “Comenzó cometiendo delitos casi irrelevantes pero luego se volcó a crímenes de mayor cuantía”.
Otra acepción de la palabra cuantía es el volumen o la cantidad computable de una cosa, que bien puede ser de bienes o de dinero, según el caso. Desde un punto de vista jurídico, se trata del valor de las cosas que se disputan en un litigio y determina la competencia de los jueces.
Se conoce con el nombre de provisión para actuaciones medioambientales, por otra parte, a la cuantía que recibe una empresa para afrontar sus obligaciones contractuales, legales o implícitas, o bien los compromisos que adquiere, siempre que su meta sea la reparación o la prevención de daños en el medio ambiente.
Las cuantías que tengan el objetivo de cubrir los gastos para rehabilitar el medio ambiente a causa de haber desmantelado o retirado un inmovilizado no entran en esta categoría, sino que deben encuadrarse en una cuenta específica.
Es importante resaltar la naturaleza imprecisa o falta de medición que caracteriza el concepto de cuantía, ya que muchas veces se utiliza en un sentido meramente teórico, diferente al que recibe el término cantidad o monto, por ejemplo, que suelen ir acompañados de valores específicos. Dicho de otra manera, no es tan correcto usar la palabra cantidad en un texto formal como sinónimo de cuantía, si no se está haciendo referencia los valores numéricos definidos sino a lo que representan, aunque en el habla cotidiana sí es posible intercambiarlos sin que afecte la comprensión del interlocutor.
