Un vector es, en el terreno de la física, una magnitud que se define a través de su punto de aplicación, su dirección, su sentido y su cuantía. Según sus características y el contexto en el que actúan, se puede diferenciar entre distintas clases de vectores, como los vectores coplanares, los vectores no coplanares, los vectores opuestos, los vectores resultantes, los vectores unitarios y los vectores concurrentes, entre otros.
En el caso de los vectores colineales, se trata de aquellos que aparecen en la misma recta o que resultan paralelos a una cierta recta. Cuando las relaciones que mantienen sus coordenadas son iguales y el producto vectorial es equivalente a 0, dos vectores son colineales.
Es decir, según la teoría en el área de la Geometría, se puede decir que dos vectores son colineales en el momento que cuentan con la misma dirección ya que, en ese caso, son directores de rectas paralelas. Eso sí, no tienen que contar con el mismo sentido de manera necesaria.
Ejemplo y representación de los vectores colineales
Podemos encontrar ejemplos de vectores colineales en la vida cotidiana. Supongamos que alguien pretende levantar un objeto pesado con ayuda de una polea. Para llevar a cabo esta acción, utiliza una cuerda que ata el objeto y que atraviesa la polea en cuestión. Al tirar de la cuerda, actúan dos fuerzas: una creada por la tensión que ejerce la cuerda hacia arriba y otra que se dirige hacia abajo y que está representada por el peso de aquello que se desea mover. Puede decirse, por lo tanto, que actúan dos vectores colineales en la cuerda.
A la hora de poder representar de manera gráfica los mencionados vectores colineales, es importante que se tengan en cuenta varios aspectos relevantes. En concreto, para hacerlo adecuadamente hay que optar por emplear tanto lo que es la dirección como el sentido, pasando por el punto de aplicación y el módulo. Este último hay que saber que viene dado por lo que es la longitud de cada vector en cuestión en base a una escala que, de forma previa, se ha procedido a determinar.
La noción opuesta
Por supuesto, no hay que olvidar que cuando nos referimos a los vectores colineales, de manera irremediable pensamos en otros que son sus opuestos y así lo manifiesta su nombre: vectores no colineales. De estos podemos destacar las siguientes señas de identidad:
-Son los vectores que no tienen la misma dirección.
-Para poder obtener la resultante de esos hay que recurrir a la utilización y aplicación de métodos geométricos o analíticos. En estos últimos juega un papel fundamental la realización y utilización de un diagrama.
-A la hora de poder realizar la suma de esos vectores no colineales hay que tener en consideración que los mismos deben encontrarse referidos a la misma magnitud física.
Es importante mencionar que un vector nulo (cuyo módulo es igual 0) resulta colineal respecto a todos sus vectores coplanares (es decir, a aquellos vectores que están en el mismo plano). Esto se debe a que los vectores nulos se representan como un punto, y los puntos caben en todas las rectas.