Las adicciones provocan una dependencia a la sustancia que se consume.
Dependencia es un término con diversos usos que puede utilizarse para mencionar a una relación de origen o conexión, a la subordinación a un poder mayor o a la situación de un sujeto que no está en condiciones de valerse por sí mismo.
TemasLa dependencia política
La dependencia política se refiere a la anulación o limitación de la voluntad de un dirigente o de una comunidad para tomar decisiones fundamentales.
Este tipo de dependencia puede surgir por motivos estrictamente políticos (como una amenaza de represalias por parte de una potencia) pero también por cuestiones económicas (cuando un país depende del dinero que recibe de otro Estado como inversiones o créditos) o culturales (por acción de los medios de comunicación globalizados).
El flagelo de las adicciones
La medicina y la psicología hablan de dependencia cuando una persona tiene una necesidad compulsiva de alguna sustancia para experimentar sus efectos o para aplacar el malestar que surge por su privación. Las drogas legales (como el alcohol o el tabaco) e ilegales (la cocaína, la heroína) generan dependencia.
Es decir, no podemos olvidarnos de otros tipos de dependencias como sería el caso de la drogodependencia. Como drogadicción también se conoce a aquel problema de salud que tienen todas aquellas personas que usan y abusan habitualmente de sustancias adictivas, las drogas, como pueden ser la heroína, la marihuana, la cocaína, las pastillas de diseño…
La dependencia emocional
Por otro lado, por ejemplo, tendríamos que hablar de lo que se conoce como dependencia emocional. Es decir, se trata de un tipo de relación de pareja que se sustenta en el hecho de que es inestable, tóxica y, ante todo, desigual. Y es que uno de los dos miembros se siente subordinado del otro.
El resultado de esa unión sentimental es que el dependiente tenga baja autoestima, se sienta menospreciado y además idealice al otro miembro. De esta manera, vivirá una situación dura y complicada en la que tiene momentos en los que se da cuenta de que no es una relación buena y feliz, sin embargo, no puede cortarla porque tiene un «enganche».
Hay personas que, por su nivel de discapacidad, dependen de otros individuos para subsitir.
¿Por qué no es capaz de cortar esa unión sentimental? Porque tiene miedo a sentirse solo, porque considera que no va a encontrar a nadie más que lo quiera y porque carece por completo, o en parte, de habilidades sociales.
Además de todo ello quien sufre la dependencia emocional se identifica porque siempre tiene necesidad de agradar, porque renuncia a ser él mismo, porque tiene constante necesidad de atención y cariño, porque se aísla del resto del mundo al considerar que solo quiere estar con su pareja…
El concepto vinculado a la discapacidad y a una oficina o habitación
Otro tipo de dependencia es la dependencia social, que aparece cuando una persona tiene un elevado de grado de discapacidad o disfuncionalidad y necesita de la ayuda de terceros para subsistir. Un ejemplo habitual de esta dependencia ocurre con los ancianos que necesitan colaboración para alimentarse o desplazarse.
Una dependencia, por último, también puede ser la oficina dependiente de otra superior o la habitación dedicada a los servicios de una casa: «Mañana tengo que ir a una dependencia de Rentas para regularizar mi situación impositiva».
