Perder la cohesión
Cuando una cosa se desvencija, pierde su cohesión normal. Deja de tener la solidez que lo caracteriza, ya que sus componentes se aflojan o se separan. Supongamos que un huracán golpea a una casa. Los fuertes vientos le arrancan el techo y la puerta y hacen estallar los cristales de las ventanas. Por eso puede decirse que el huracán en cuestión logró desvencijar la construcción.
Nótese que esta palabra se usa con mucha frecuencia en el habla cotidiana, a pesar de su relativa extensión y complejidad, mayores que las de «romper» o «aflojar», por ejemplo. De todos modos, es importante señalar que debemos usarla para hablar del todo, y no de sus partes: se desvencija una mesa, y no sus patas, ya que éstas «se desajustan». Es necesario entender este matiz para escoger el verbo adecuado según el punto de vista de la descripción.
Sentido simbólico
En el sentido simbólico, se habla de desvencijar un argumento o una creencia, para hacer referencia a desmontar, desarticular o refutar de manera contundente esa argumentación o creencia. Implica desestabilizar o desacreditar el fundamento o la estructura lógica sobre la cual se basa.
Un hombre, en base a sus creencias o a postulados carentes de rigor científico, puede afirmar que las vacunas son negativas para la humanidad. Frente a esta situación, un médico está en condiciones de desvencijar su postura con explicaciones técnicas y estadísticas que demuestran que las vacunas han salvado millones de vida a lo largo de la historia.
Tomemos el caso de una administración que opta por quitarle recursos al sistema estatal de seguridad social para minimizar su alcance y así reducir gastos. Desde la oposición, en este marco, aseguran que las autoridades pretenden desvencijar dicho sistema.
Veamos dos oraciones de ejemplo con este sentido: «El experto desvencijó el argumento del oponente con datos sólidos y pruebas contundentes», «El filósofo desvencijó las creencias arraigadas de la sociedad mediante una crítica profunda y bien fundamentada». En ambos casos, desvencijar implica desarmar o debilitar los elementos que sostienen el argumento o la creencia, mostrando falacias, contradicciones, falta de evidencia o razonamiento defectuoso.
Ejemplos
A continuación vemos algunas oraciones con el término desvencijar:
- «Este gobierno neoliberal busca desvencijar el Estado a través de un ajuste feroz»;
- «El bloque continental se podría desvencijar si los dos países más poderosos no llegan a un acuerdo»;
- «En apenas unos minutos, los delincuentes se encargaron de desvencijar el automóvil que habían robado»;
- «El mueble viejo se desvencijó cuando intenté moverlo»;
- «El paso del tiempo y la falta de mantenimiento hicieron que la puerta se desvencijara»;
- «El terremoto dejó muchas casas desvencijadas, con paredes agrietadas y estructuras dañadas«;
- «Al sentarse bruscamente en la silla, ésta se desvencijó y el hombre cayó al suelo»;
- «El peso excesivo del equipaje hizo que la maleta se desvencijara durante el viaje».
Etimología
El verbo desvencijar tiene su origen en el español antiguo. Deriva de la combinación de dos componentes: des-, un prefijo que indica negación o inversión del sentido, y vencija o vijija, una forma antigua de vejiga, que se refería a «una bolsa o envoltura».
En su sentido original, desvencijar se utilizaba para describir el acto de «romper o deshacer las vejigas», es decir, «abrir o desinflar bolsas o envoltorios». Con el tiempo, el significado de la palabra se extendió para incluir el concepto de «desmontar o desarmar algo que estaba unido o ajustado».