Expresión facial es un concepto que alude a una herramienta de lenguaje no verbal basada en gestos y reacciones enlazados a emociones, pensamientos y estados particulares de ánimo.
Prestar atención al rostro de alguien, así como también analizar su postura, su comportamiento y hasta su lenguaje oral, es indispensable a la hora de establecer qué clase de actitud o sensación está evidenciando un sujeto.
Guiñar un ojo como símbolo de complicidad, esbozar una sonrisa al saludar a gente querida, fruncir el ceño frente a un panorama preocupante, reaccionar con una expresión de tristeza al recibir una noticia desalentadora o poner cara de asco ante un olor nauseabundo son recursos que hay que saber emplear y descifrar en el arte de la comunicación no verbal.
Tipos de expresión facial
Las expresiones del rostro se segmentan en diferentes categorías en función de sus características.
Uno de los tipos de expresión facial más fáciles de reconocer se vincula a la denominada teoría de las emociones básicas de Ekman. Paul Ekman, un psicólogo de origen estadounidense, ha señalado que existen manifestaciones básicas, o de interpretación universal, motivadas por la sorpresa, la ira, el miedo, la alegría o felicidad, el asco y la tristeza. Con el tiempo, este profesional amplió su listado incorporando emociones asociadas al desprecio, el alivio, la vergüenza y la soberbia, entre otros.
Hay, asimismo, gestos en el semblante humano motorizados por los celos, el dolor o el arrepentimiento, por enumerar algunas emociones complejas.
Si bien hay postulados que sostienen que las muecas y los gestos nacidos a raíz de sentimientos y sensaciones propias de nuestra especie, existen investigadores que sostienen que la cultura, las costumbres de un pueblo, es determinante para la transmisión y la comprensión de emociones.
Componentes de la comunicación gestual
Los músculos faciales son componentes imprescindibles de la comunicación gestual de los seres humanos. Cada movimiento expresivo requiere poner en acción a alguna parte de la cara: desde una elevación de cejas o un parpadeo hasta un bostezo o una batería de muecas.
Existen, simultáneamente, las microexpresiones. Así se define a reacciones muy breves concentradas en el rostro que se llevan a cabo de modo automático e involuntario. Por lo general, al no poder ser controladas se torna muy difícil disimularlas u ocultarlas pero, para alivio de los individuos, no resulta sencillo descubrir e interpretar cada microexpresión.
Si bien todavía hay que trabajar para poder determinar si todos los habitantes de este mundo compartimos el mismo código a la hora de reflejar sentimientos, es posible advertir la existencia de estereotipos enlazados a microexpresiones motivadas por estímulos de índole emocional que resultan comunes a la humanidad, sin distinción de credo, raza, nacionalidad, género ni edad.
Los gestos son otros elementos valiosos a nivel expresivo ya que envían señales que influyen en aquellos que adoptan el rol de receptores de un mensaje. Alcanza apenas un mohín, una mueca, para captar la atención de alguien o hacerse entender sin necesidad de apelar al habla.
Tecnología centrada en la expresión facial
En la actualidad disponemos de numerosas herramientas nacidas de la tecnología centrada en la expresión facial.
Una de ellas es la inteligencia artificial, recurso que, con ondas de radio o inalámbricas, podría llegar a descifrar cuál y cómo es el ánimo de una persona en determinado momento gracias a la evaluación de la frecuencia cardíaca, el ritmo de la respiración y el reconocimiento facial.
La animación facial, en tanto, es una técnica que le da credibilidad a personajes incluidos, por ejemplo, en una película de dibujos animados o en algún videojuego. Gracias a ello, los protagonistas del material consiguen poner cara de enfado, hacer una expresión de odio al detectar un villano o ruborizarse, por enumerar diferentes alternativas.
El modelado 3D facial es otra innovación vinculada a los rostros que se aprovecha en el campo de la medicina estética para efectuar procedimientos más precisos y obtener los mejores resultados posibles en función de los rasgos y las necesidades de cada paciente.
Con el correr de los años, por otra parte, han ido surgiendo programas de edición de fotografía que permiten modificar imágenes cambiando la expresión facial del sujeto retratado o embelleciendo el panorama, por detallar posibilidades usuales.
Problemáticas que afectan al semblante
Existen, lamentablemente, condiciones de salud mental, accidentes y problemáticas de los ámbitos de la salud y el bienestar que afectan al semblante.
La sonrisa y el normal movimiento de la musculatura, por ejemplo, se pueden perder como consecuencia de una parálisis facial. En la etapa de rehabilitación, quienes sufren esta patología tienen a disposición la llamada terapia de espejo para parálisis facial que invita a efectuar movimientos simétricos frente a una superficie espejada para recuperar fuerza, ejercitarse y reaprender determinados gestos.
La ciencia ha puesto la lupa, además, en el vínculo entre enfermedad de Parkinson y expresión facial. Como ir perdiendo expresividad es un síntoma no tan conocido de este mal falta información al alcance del común de la sociedad para saber cómo actuar y vincularse con un familiar o conocido con dificultades al momento de comunicarse o manifestar emociones.