Gasto es la acción de gastar (emplear el dinero en algo, deteriorar con el uso). En un sentido económico, se conoce como gasto a la cantidad que se gasta o se ha gastado. El gasto es un concepto de utilidad tanto para las familias como para las empresas o para el gobierno.
Una familia necesita controlar su gasto para que los ingresos le permitan afrontar sus obligaciones y satisfacer sus necesidades. Una empresa, por su parte, debe conocer sus gastos al detalle ya que atentan contra su beneficio o ganancias. En el caso de un gobierno, que no busca rédito financiero, el control del gasto es importante para evitar el déficit fiscal.
El pago de servicios (electricidad, gas, telefonía) y la compra de alimentos, por ejemplo, forman parte del gasto de una familia. Las empresas gastarán también en insumos y salarios, mientras que un gobierno gasta en obras públicas.
Gastos e ingresos
En este sentido, tenemos que destacar que, por ejemplo, todo trabajador por cuenta propia o autónomo es habitual que de manera mensual realice un presupuesto para poder conocer el estado de su empresa. De ahí que establezca un documento donde recoja tanto lo que son los ingresos que recibe como los gastos (periódicos e imprevistos).
De esta forma, podrá saber si el negocio en cuestión va creciendo, si está estancado o si sus beneficios son suficientes para poder mantener su economía.
Distintos tipos
Se denomina gasto público al realizado por las administraciones públicas. El gasto social es el gasto público que se destina a cubrir las necesidades básicas de las personas.
Y todo ello sin olvidar que también está el gasto de representación. Este hace referencia a la cantidad monetaria que se le otorga, por ejemplo, a un representante político para que pueda hacer frente a los gastos que trae consigo el atender a las distintas actividades sociales que debe llevar a cabo.
Expresiones con el término gasto
De la misma manera, y partiendo de dicha acepción, podemos subrayar el hecho de que existen diversas expresiones coloquiales que hacen uso del término que ahora nos ocupa. Así, por ejemplo, está la locución adverbial «correr con los gastos» que se emplea para referirse al hecho de que alguien es quien va a pagar todos los gastos que genera una actividad en sí. Una muestra de este significado sería la frase siguiente: «Manuel corrió con todos los gastos de la comida de empresa».
Pero aquella no es la única expresión que utiliza el concepto que estamos abordando. Otra que hace lo propio es «cubrir gastos». Con la misma lo que se intenta expresar es que un negocio en sí está generando la producción necesaria para poder hacer frente justo a todos los gastos que se han creado.
Otros usos del concepto
Para la física, el gasto es la cantidad de líquido o de gas que pasa por una tubería o un orificio durante un tiempo determinado y frente a ciertas circunstancias.
En cuanto al deterioro por el uso, el gasto hace referencia a los problemas, las fallas o las falencias que surgen en una cosa ante su utilización en repetidas oportunidades. Un par de zapatillas puede sufrir el gasto tras varias caminatas: «Tengo las zapatillas tan gastadas que me resbalo».