Una grieta es una hendidura alargada que se produce en un cuerpo sólido. Dicha abertura o fisura tiene lugar cuando se separan dos materiales.
Por ejemplo: “El terremoto dejó una inmensa grieta en la avenida principal de la ciudad”, “El golpe produjo una grieta en su cráneo que lo llevó a la muerte”, “Cuidado que hay una grieta en la mesa y se pueden caer los vasos”.
La geología es la ciencia que analiza las grietas que se producen en la tierra. Los expertos distinguen entre las grietas de contracción (que se generan cuando se contrae el suelo) y las grietas de cuña (de forma vertical, producidas después de la congelación rápida del suelo).
Grieta en una pared
La presencia de grietas es muy común en ciertos edificios y se aprecian en forma de fisuras generalmente alargadas que, de acuerdo con la causa de su aparición, se extienden con el paso del tiempo.
Entre las razones por las que se forma una grieta en un muro, si bien existe un gran número, es posible decir que las más comunes son los daños por una edificación de calidad deficiente, las catástrofes naturales (como inundaciones, incendios y movimientos sísmicos) y fuertes colisiones contra el edificio a causa de impactos de vehículos o derrumbe de alguna estructura aledaña.
Algo muy importante a tener en cuenta con respecto a la causa de la formación de una grieta es determinar si se trata de un problema aislado o si continuará creciendo, ya que en este último caso la solución no es taparla sino atacar directamente su origen.
La reparación
Antes de proceder a la reparación de grietas en las paredes, resulta indispensable identificarlas todas y observar su profundidad y su tamaño, además de intentar entender su origen. Seguidamente, por lo general se suele acudir a un especialista en la materia, pero esto no significa que las personas más hábiles y con ganas de aprender no puedan adquirir las destrezas necesarias para resolver el problema por su cuenta.
Una vez detectada cada grieta, es importante limpiar la pared y esperar a que se seque y quede libre de impurezas. Los materiales necesarios para el trabajo son masilla (que se usará en la restauración misma) y pintura acrílica (para ocultar el parche). Por otro lado, también se debe contar con una espátula, una lija y un paño limpio.
Veamos los pasos para reparar cada grieta:
- Aplicar la masilla sobre la zona afectada, haciendo uso de la espátula. Es importante asegurarse de rellenar bien cada grieta.
- Esperar a que se seque la masilla y entonces lijar cada parte reparada para emparejarlas con la pared.
- Remover el exceso de polvo de la pared con el paño, para asegurarnos de que la pintura se adhiera correctamente a la superficie.
- Preparar la pintura y aplicarla, para dejar la pared como nueva.
Grieta en la piel
Una grieta en la piel, por otra parte, es una hendidura poco profunda que puede surgir en diversas partes del cuerpo.
Estas grietas suponen problemas dermatológicos que, en ciertos casos, pueden tratarse con productos humectantes.
Uso simbólico del concepto
A nivel simbólico, la noción de grieta se utiliza para nombrar a las falencias que atentan contra la solidez o la unidad de algo. Un argumento puede exhibir grietas cuando es posible rebatirlo a partir de la lógica: “El candidato opositor aprovechó una grieta en el discurso del ministro sobre la seguridad y empezó a criticarlo con dureza”, “La policía no encontró ninguna grieta en las declaraciones del sospechoso”.
Una grieta también puede ser un defecto en una obra artística, como ser una película, una representación de teatro, un concierto, etc. Por supuesto, en este caso, las grietas son subjetivas y dependen de quien hace la crítica: “El filme tiene su principal grieta en su ritmo cansino”.