La ingeniería de sistemas es una carrera universitaria que se encarga del diseño, la programación, la implantación y el mantenimiento de sistemas. A diferencia de otras ramas de la ingeniería, esta disciplina no se ocupa de productos tangibles (los ingenieros civiles, por ejemplo, construyen edificios), sino de productos lógicos.
Por lo tanto, la ingeniería de sistemas implica el uso de nociones matemáticas que permitan concretar la aplicación tecnológica de las teorías de los sistemas. Se trata de una ciencia interdisciplinaria, que requiere de diversos conocimientos para plasmar sus diseños en la vida práctica.
Finalidad de la ingeniería de sistemas
La ingeniería de sistemas permite transformar una necesidad operativa en una descripción de los parámetros del rendimiento de un sistema, con su correspondiente configuración. Por otra parte, posibilita la integración de los parámetros técnicos relacionados de modo tal que las interfaces de programa y funcionales sean compatibles y se garantice el funcionamiento del sistema total.
Al realizar su trabajo, el especialista en esta materia debe asegurar que el sistema cumpla con los principios de fiabilidad, mantenibilidad, seguridad y eficiencia, entre otros.
Disciplinas que la sustentan
Además de lo expuesto no podemos pasar por alto el hecho de que todo profesional del sector de la ingeniería de sistemas se encuentra trabajando teniendo en cuenta tres disciplinas o pilares fundamentales. Así, por ejemplo, está la llamada ingeniería de sistemas cognitivos que es la que gira en torno a cuestiones tales como la inteligencia artificial, la ergonomía, la dirección de programadores o el proceso de la información a través de los entes humanos o no humanos.
De la misma forma, la ingeniería de sistemas también está íntimamente relacionada con la investigación de operaciones y con los llamados sistemas de información, es decir, los elementos que funcionan y trabajan conjuntamente con el claro objetivo de poder ayudar a las tareas y actividades de una empresa. Más concretamente contribuyen a respaldar dichas acciones a través de lo que es la entrada, el almacenamiento, el procesado y la posterior salida de la información.
Tres pilares los citados que también se convierten en ejes centrales de otra disciplina que se da en llamar ingeniería en sistemas computacionales que es la que se encarga de analizar a fondo la realidad existente para poder llevar a cabo posteriormente el desarrollo e instalación de sistemas informáticos complejos que sean de gran utilidad.
Etapas de un proyecto de ingeniería de sistemas
El ingeniero de sistemas se encarga de las diferentes etapas de un proyecto vinculado a los sistemas. De esta forma, analiza el rendimiento económico, la efectividad de los recursos humanos y el uso tecnológico vinculado a sus creaciones.
En concreto, el ingeniero de sistemas puede dedicarse al desarrollo e implementación de redes complejas, a la programación de aplicaciones informáticas y al manejo de base de datos, por ejemplo.
La formación profesional
Diversas propuestas formativas son las que existen en estos momentos sobre la ingeniería de sistemas como sería el caso de varios master universitarios. En ellos los alumnos estudiarán la misma aplicada, por ejemplo, a ámbitos como los sistemas de telefonía, la generación de energía renovable o la automatización de la industria manufacturera.
Los profesionales en ingeniería de sistemas son muy requeridos en la actualidad ante el avance de la tecnología y la necesidad de informatización que tienen las empresas.