Loguear es un verbo que se emplea con frecuencia en nuestro idioma, aunque no forma parte del diccionario desarrollado por la Real Academia Española (RAE). Su uso suele darse en el contexto de la informática.
El término deriva de la expresión inglesa log in, que alude a la acción necesaria para acceder a un sistema. Loguear, por lo tanto, equivale a log in: ingresar a una plataforma o a una herramienta digital.
Loguear supone acceder o ingresar a una plataforma o a un sistema digital.
TemasLa acción de loguear
Para que un usuario pueda loguearse y hacer uso de un determinado servicio, primero tiene que registrarse en el sistema en cuestión. Supongamos que una persona desea utilizar una cuenta de correo electrónico. Para esto deberá completar un formulario de registro en Gmail, Hotmail o Yahoo!, por mencionar algunas opciones, aceptando sus condiciones y generando un nombre de usuario y una clave. Con estos datos en su poder, ya se podrá loguear ingresando la información correspondiente y así aprovechar su email.
Loguear, en definitiva, implica identificarse. Si solo los usuarios registrados cuentan con acceso a un sistema, el interesado tiene que demostrar que dispone de ese permiso, indicando su usuario y password cuando se le sea solicitado.
Para loguearse, hay que introducir el nombre de usuario y la clave.
Elección de la contraseña
A la hora de poder comenzar a loguearse en una página web o plataforma se hace esencial elegir adecuadamente la contraseña o clave. Y es que es la manera de evitar que esa pueda ser «hackeada» con cierta facilidad.
Por ese motivo, se establece que a la hora de elegir dicha clave se hace imprescindible tener en cuenta una serie de consejos importantes:
-Mientras más compleja resulte, mejor. Y es que será más difícil que alguien pueda descubrirla. Por eso, se recomienda introducir letras en mayúsculas y en minúsculas, números e incluso símbolos.
-Es necesario recurrir a no utilizar como tal conjuntos de palabras o números demasiado sencillos. Es decir, hay que evitar optar por «12345678» o «abcdef», por ejemplo.
-De la misma manera, se recomienda no utilizar como contraseñas palabras o números asociados a la persona en cuestión. Así, por ejemplo, no se aconseja que Manolo Pérez use como clave Pérez o lo que sería su fecha de nacimiento.
-Además, los expertos en informática también aconsejan que se usen claves diferentes para cada página web o plataforma. Y es que así se evita que si un hacker encuentra la contraseña pueda acceder a todos los espacios de esa persona.
No hay que pasar por alto que en distintas webs se prevé que el usuario al loguearse pueda haber olvidado su clave. En ese caso, solo tendrá que hacer clic en la frase: «Olvidé mi contraseña». De esta manera, se le enviará a su email los pasos a seguir para poder recuperarla.
Desloguear, la salida del sistema
Lo opuesto a loguearse es desloguearse, equivalente al inglés log off. En este caso, el sujeto desea salir del sistema y, para esto, cierra su sesión.
Como se puede advertir, la acción de loguear se ha vuelto habitual en la vida cotidiana. Un individuo debe loguearse para consultar su correo electrónico, operar con su cuenta bancaria vía Internet, vender productos en eBay o disfrutar series a través de Netflix, por mencionar algunas posibilidades.
