Macro es un elemento compositivo que proviene de la lengua griega y que señala algo que es «grande». Se trata, por lo tanto, de lo opuesto a micro («pequeño»).
El prefijo macro permite formar diversos conceptos, como macrofotografía (la técnica que se desarrolla cuando aquello que se retrata tiene un tamaño que resulta igual o inferior a las dimensiones del sensor electrónico), macrobiótico (una forma de alimentación que apunta a aumentar el bienestar de la persona) o macroeconomía (la rama teórica que estudia el comportamiento global de la economía, analizando la totalidad de los bienes producidos, el estado del empleo, los ingresos, etc.).
La macrofotografía
Es importante subrayar que en el caso de la citada macrofotografía, se hace uso de los llamados objetivos macro que son aquellos que se utilizan para enfocar de la manera más precisa a una distancia muy corta y que ofrecen como resultado ampliaciones de tamaño natural.
Y todo ello sin olvidar que también existen los objetivos supermacro que se caracterizan por tener una apariencia o señas de identidad similares a las que poseen los microscopios y que no cuentan con anillo de enfoque.
De igual modo, también están los llamados falsos macros que son aquellos que aparecen en multitud de cámaras fotográficas digitales y que se presentan como elementos para conseguir una ampliación del 50% aproximadamente, cuando en realidad no lo logran.
El concepto en la informática
En informática, se utiliza la palabra macro para referirse a la macroinstrucción, que es la secuencia de instrucciones almacenadas para posibilitar la ejecución organizada de una orden. Esto quiere decir que una macroinstrucción permite que una única orden desencadene una secuencia de varias instrucciones.
Puede entenderse a una macro como una instrucción de complejidad que está compuesta por diversas instrucciones más simples. Es posible almacenar una macro en el propio software en el que se ejecuta, ya sea mediante un botón o una cierta combinación de teclas.
Cabe destacar que el software también está formado por un conjunto de instrucciones. Sin embargo, se diferencia de las macroinstrucciones en que la ejecución de las macros se desarrolla de manera secuencial y que no existe la posibilidad de establecer una bifurcación.
El seguimiento secuencial de las macro permite simplificar tareas y ahorrar pasos. Por ejemplo: una macro con la instrucción de borrar un registro de una base de datos puede ser «llamada» desde otra instrucción, lo que le permitirá ahorrar tiempo al programador y al usuario.
Macros en una hoja de cálculo
Uno de los programas donde con más frecuencia se habla de las macros es en Microsoft Excel que es un software que se utiliza a nivel empresarial fundamentalmente para poder desarrollar y trabajar con lo que son hojas de cálculo. En esta aplicación se utiliza el término macros Excel para hacer referencia al código de programación que se realiza haciendo uso del lenguaje de programación VBA (Visual Basic for Applications).
Gracias a estas macros se puede desde crear nuevas funciones hasta automatizar diversas tareas del programa para que se puedan acometer simplemente mediante un sencillo click. Y todo ello sin olvidar tampoco que, de igual manera, permiten crear nuevas aplicaciones y expandir las soluciones que presenta Excel a través de nuevas soluciones o herramientas.
Los programadores utilizan macroprocesadores para abreviar ciertos fragmentos de sus programas y poder usar dichas abreviaturas todas las veces que su tarea lo requiera.