Minucia es algo que carece de importancia o valor. La etimología de esta palabra nos lleva a minutia, un vocablo del latín que puede traducirse como pequeñez.
Nimiedad o bagatela
Puede decirse que una minucia es una nimiedad o una bagatela. El término suele emplearse para aludir a aquello que resulta ínfimo o intrascendente y que, por lo tanto, no merece mayor atención ni análisis.
Por ejemplo: “Esta vez el café corre por mi cuenta y no acepto discusiones, no vamos a perder el tiempo con una minucia”, “En lugar de hacer referencia al asunto principal de la sesión, el diputado orientó su discurso a una minucia que a nadie le interesaba”, “La verdad es que me distancié de mi novia por una minucia y ahora estoy arrepentido”.
En la primera oración el emisor afirma que no está dispuesto a detenerse en la decisión de pagar el café o permitirle a su interlocutor que lo haga, ya que en su opinión se trata de una minucia, de algo que carece de mayor importancia. Para él, lo principal es el hecho de pasar un rato junto a la otra persona. Por ultimo, una persona afirma haberse separado de su novia por cuestiones de poca importancia, y le gustaría anular su decisión.
La segunda oración nos presenta una situación en la cual el término minucia sirve para denunciar una falta de ética: un diputado decide ignorar los temas relevantes durante su discurso, enfocándose en cambio en otros que no son de interés para los oyentes.
Minucia en sentido negativo
El término minucia tiene un significado con matices relativamente negativos, ya que hace referencia a cosas de valor escaso. Sin embargo, no siempre se usa en situaciones lamentables: como pudimos ver en los ejemplos anteriores, simplemente puede servir para enfocar la atención en los asuntos que realmente importan, dejando de lado los irrelevantes. Sin embargo, en algunos casos su uso sí denota el grave error de pensar primero en los detalles insignificantes que en los esenciales.
Supongamos que un hombre ingresa armado a un concierto y comienza a disparar a mansalva, asesinando a ocho personas e hiriendo a otras treinta. Un periodista, al narrar el terrible hecho, señala que el sujeto accedió al recinto sin pagar su entrada. Como se puede advertir, hacer hincapié en dicha minucia carece de sentido ante la magnitud de la tragedia. Resulta muy preocupante que un profesional de la información preste atención al detalle del billete, siendo que se encuentra ante una tragedia que se podría enmarcar en un acto de terrorismo.
Tomemos el caso de un documental centrado en la figura de un famoso cantante. Si bien muchos espectadores esperaban encontrarse con datos interesantes sobre su vida personal o su trayectoria artística, la película gira en torno a anécdotas menores y detalles intrascendentes. Por eso puede afirmarse que la obra presenta minucias y no un contenido sustancioso. Este ejemplo no tiene una gravedad comparable con la del anterior, pero también se trata de un trabajo mal hecho, que no cumple los principios del género escogido ni satisface las expectativas del público.
Minuciosidad
Minuciosidad es la cualidad de alguien minucioso, que les presta especial atención a las cosas pequeñas, detalles que para otras personas pueden no tener ninguna importancia. Como puede advertirse, este término está relacionado con el del sustantivo minucia. Veamos algunas oraciones de ejemplo: “En su nuevo libro, el suizo cuenta con minucia cómo llegó a convertirse en el mejor tenista del mundo”, “Voy a estudiar el proyecto con minucia antes de dar una respuesta”, “No deberías firmar un contrato sin antes leer con minucia todas sus cláusulas”.