Un modelo educativo consiste en una recopilación o síntesis de distintas teorías y enfoques pedagógicos, que orientan a los docentes en la elaboración de los programas de estudios y en la sistematización del proceso de enseñanza y aprendizaje.
En otras palabras, un modelo educativo es un patrón conceptual a través del cual se esquematizan las partes y los elementos de un programa de estudios. Estos modelos varían de acuerdo al periodo histórico, ya que su vigencia y utilidad depende del contexto social.
Al conocer un modelo educativo, el docente puede aprender cómo elaborar y operar un plan de estudios, teniendo en cuenta los elementos que serán determinantes en la planeación didáctica. Por eso, se considera que el mayor conocimiento del modelo educativo por parte del maestro generará mejores resultados en el aula.
El modelo educativo tradicional
El modelo educativo tradicional se centra en la elaboración de un programa de estudios, sin demasiados elementos adicionales ya que no se tienen en cuenta de forma explícita las necesidades sociales ni la intervención de especialistas, entre otros factores.
Este modelo educativo contempla la figura del profesor (que cumple un papel activo), el método (la clase tipo conferencia), el alumno (con un papel receptivo) y la información (los contenidos presentados como distintos temas).
En este sentido, el modelo tradicional presenta una escasa influencia de los avances científico-tecnológicos en la educación, por lo que resulta algo limitado en la actualidad. De todas formas, se reconoce su utilidad como base pedagógica en la formación de diversas generaciones de profesores y de alumnos.
A grandes rasgos, el modelo educativo tradicional puede usarse para construir sobre él uno moderno, adecuado a las necesidades de los estudiantes y de los maestros, así como a los recursos tecnológicos y educativos que tenemos en la actualidad, o bien puede ignorarse completamente y trabajar sobre un lienzo en blanco para dar lugar a una innovación absoluta. El segundo caso es mucho más difícil de conseguir, y no necesariamente mejor.
Problemas en la enseñanza
Uno de los problemas con esta forma de enseñar es la innegable rigidez del sentido en el cual se mueven los conocimientos: siempre desde el profesor hacia los alumnos. Esto también se percibe en los contenidos mismos, ya que no cambian porque nadie los cuestiona. De este modo se cierran las puertas a la opinión por parte de los estudiantes y se estanca el saber, negando su evolución.
En la segunda mitad del siglo XX aparecieron diversos modelos educativos considerados innovadores, que buscan dejar atrás el tradicional o bien complementarlo con nuevas técnicas y herramientas.
Innovación en los modelos educativos
Uno de ellos es el Diseño de Objetos de Aprendizaje, el cual elabora material didáctico que se usa en el repaso de los temas complejos con el objetivo de potenciar el correcto aprovechamiento de los procesos pedagógicos. Se centra en las necesidades de los docentes y de los estudiantes a la vez que integra varias tecnologías de la información.
Por otro lado se encuentra la Pedagogía Activa, que se enfoca en la importancia de enseñarles a los alumnos a estudiar en lugar de simplemente obligarlos a memorizar los contenidos. Los elementos fundamentales de este modelo educativo son la guía y la motivación, por parte del mentor, para que los estudiantes dialoguen y saquen sus propias conclusiones.
También debemos mencionar la colaboración escolar para la transformación educativa, un modelo educativo que busca reforzar la gran importancia del bienestar del alumno, teniendo en cuenta todos los aspectos de su desarrollo. Esto abarca la vida en familia y la experiencia en la escuela, para lo cual deben involucrarse tanto los padres o tutores del niño como sus maestros y psicopedagogos, entre otros profesionales.