Para poder conocer el significado del término ortesis se hace necesario, en primer lugar, descubrir su origen etimológico. En este caso, tenemos que exponer que se trata de una palabra que deriva del griego, pues es el resultado de la suma de los siguientes componentes léxicos de dicha lengua:
-El vocablo «orthos», que puede traducirse como «derecho».
-La forma verbal «tithemi», que es equivalente a «yo pongo».
-El sufijo «-sis», que se usa para indicar «acción».
El término ortesis no forma parte del diccionario de la Real Academia Española (RAE). Sin embargo esta noción, que también se menciona como órtesis (con acento en la O), se usa en el ámbito de la medicina para aludir al dispositivo externo que se aplica al cuerpo con el objetivo de modificar la estructura o el funcionamiento del sistema músculo-esquelético.
Una ortesis, por lo tanto, puede ser una férula, un soporte u otro dispositivo que contribuye al desarrollo de una acción o que la corrige. De esta manera, consigue una mejora en el funcionamiento del aparato locomotor o subsana una deformidad.
La fisioterapia, la podología y la ortopedia, entre otras especialidades médicas, recurren a las ortesis en tratamientos y rehabilitaciones de sus pacientes. A nivel general, confieren seguridad en los movimientos, permiten ahorrar energía y minimizan el dolor.
Es importante no confundir una ortesis con una prótesis. Mientras que las ortesis son apoyos exteriores, las prótesis se encargan de reemplazar -ya sea de manera parcial o total- un miembro o un órgano con dismetría, invalidez o incapacidad.
Un médico debe ser el encargado de la prescripción de una ortesis tras analizar el cuerpo del paciente. Este profesional tiene que indicar cuál es el producto apropiado según el defecto detectado. Existen las ortesis protectoras, las ortesis estabilizadoras, las ortesis correctoras y las ortesis funcionales.
Las ortesis protectoras, por un lado, lo que vienen a hacer es alinear adecuadamente lo que es un miembro del cuerpo que está lesionado o bien descargar ese citado miembro.
Por otro lado, las ortesis estabilizadoras tienen como función principal el controlar un miembro o un segmento del mismo estabilizando lo que son sus articulaciones correspondientes.
Las ortesis correctoras, por su parte, son las encargadas de, como indica su propio nombre, corregir lo que es una deformidad.
Por último, las mencionadas ortesis funcionales podemos establecer que son las realizan una función concreta sobre un miembro del cuerpo que está parético o paralizado en un segmento determinado. Precisamente para alcanzar ese objetivo disponen de un elemento que puede ser elástico o contráctil. Nos estamos refiriendo a que pueden contar con un muelle, un dispositivo eléctrico…
No obstante, existen otras clasificaciones de las llamadas ortesis. Así, por ejemplo, también se habla de las ortesis de miembro superior, de las de miembro inferior o incluso de las llamadas ortesis de columna, entre otras.
Así como hay ortesis que corrigen movimientos o posturas, otras estabilizan una región. Las ortesis pueden tanto movilizar una zona corporal de forma controlada como inmovilizarla por completo, de acuerdo a lo que sea necesario.
