Pomelo es el nombre que recibe el fruto del pomelero, un árbol cuyo nombre científico es Citrus × paradisi. En algunos países, esta fruta se conoce como toronja. Por ejemplo: «Me gusta beber un vaso de jugo de pomelo por las mañanas», «Cuando era chico, siempre comía pomelo con miel», «Este trago lleva ron, jugo de pomelo y azúcar».
Los biólogos afirman que el pomelo es un híbrido que surgió espontáneamente a partir de la mezcla del Citrus x sinensis y el Citrus maxima durante el siglo XVII. Este fruto carnoso, con aspecto de globo, puede llegar a tener una circunferencia de unos quince centímetros.
Características del pomelo
La cáscara del pomelo, de tono rosado o amarillo, es muy gruesa. Su carne es jugosa y, por lo general, bastante ácida, aunque el sabor depende de la especie de pomelo en cuestión.
El pomelero crece sobre todo en regiones de climas subtropicales. Estados Unidos, China y Sudáfrica son, en ese orden, los principales productores de pomelo de todo el mundo.
Formas de consumo
Lo habitual es que el pomelo se consuma fresco y sin ningún tipo de cocción, acompañado de azúcar, miel u otro endulzante. Su jugo también es muy popular gracias a la elevada cantidad de vitamina C que aporta al organismo.
Es posible también comer pomelo en ensaladas o, tras un periodo de cocción, como confitura. Incluso se pueden elaborar dulces y conservas con esta fruta.
Beneficios del pomelo
Como sucede con la mayoría de las frutas y verduras, el pomelo es muy beneficioso para nuestra salud, gracias a una serie de propiedades que a veces los consumidores desconocen (excepto por su gran contenido en vitamina C, uno de sus atractivos principales). Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta fruta tiene efectos negativos cuando se combina con ciertos medicamentos indicados bajo receta, por lo cual es importante consultar con un médico antes de usarlo con fines curativos. Veamos algunas de las ventajas de comer pomelo:
- Ayuda a perder peso: dado que el pomelo tiene un gran porcentaje de agua, de enzimas que colaboran en la eliminación de las grasas y no abunda en sodio, es una fruta ideal para aumentar el metabolismo de nuestro organismo, y esto se traduce en una tendencia menor a subir de peso, algo que pocas personas podrían rechazar. Para que su efecto sea insuperable, se recomienda comer tres piezas de pomelo a la semana.
- Sirve para prevenir la artritis: el secreto en este caso se encuentra en el ácido salicílico, el cual colabora en la descomposición del calcio inorgánico de nuestro organismo, el cual tiende a acumularse en el tejido cartilaginoso de las articulaciones y puede causar artritis. Para los pacientes de esta enfermedad, se recomienda beber un preparado de vinagre de sidra de manzana con zumo de pomelo para disminuir sus efectos y reducir los síntomas notablemente.
- Tiene acción antiséptica: el ácido salicílico puede ofrecernos otro beneficio, ya que es un poderoso antiséptico. Para aprovecharlo, se puede mezclar agua con extracto de semilla de pomelo y aplicarlo sobre infecciones fúngicas o bacterianas.
- Previene el cáncer: el pomelo cuenta con un pigmento carotenoide denominado licopeno, el cual le da su color rojizo, que también actúa previniendo la formación de tumores y eliminando los radicales libres que provocan diferentes tipos de cáncer. Como si esto fuera poco, este pigmento ofrece mejores resultados cuando se combina con las vitaminas C y A, ambas contenidas en esta maravillosa fruta.
- Reduce el colesterol: gracias a la acción de los antioxidantes del pomelo, podemos reducir eficazmente los niveles de colesterol.
Un personaje humorístico
En otro ámbito, Pomelo es el nombre de un personaje creado por el humorista argentino Diego Capusotto.
Pomelo parodia el comportamiento de las estrellas de rock, realizando acciones que resultan absurdas. Se trata de un artista egocéntrico que siempre pretende sacar a relucir su fama.