La presbicia es un trastorno médico que se produce cuando la luminosidad de cuerpos ubicados a una determinada distancia del ojo hace foco en una región posterior a la retina. Lo que provoca la presbicia es un inconveniente para visualizar de cerca, ya que resulta difícil enfocar las cosas cercanas.
Este defecto suele desarrollarse después de los 40 años de edad. Está vinculado a una disminución de la capacidad de acomodación de los ojos, necesaria para ver nítidamente aquellos objetos ubicados cerca. La acomodación se desarrolla a través de una alteración de la forma del cristalino, impulsada por el músculo ciliar. Cuando esta capacidad empieza a reducirse, el poder óptico disminuye y surge la presbicia.
Dificultades generadas por la presbicia
Al avanzar la presbicia, la persona puede tener grandes problemas para leer un libro, una revista, el diario o cualquier texto que ubique cerca de sus ojos. Las letras aparecen borrosas, ya que la visión no hace foco de manera correcta.
La situación cambia si el sujeto aleja un poco el texto o visualiza objetos lejanos, ya que allí recupera la nitidez, aunque resulte difícil distinguir las letras por la distancia.
Tratamientos
Existen diferentes tratamientos para la presbicia. A continuación se detallan algunos de ellos:
- Gafas: gracias al uso de lentes convexas graduadas de entre 1 y 3 dioptrías, los pacientes de presbicia suelen ser capaces de volver a leer con facilidad a 33 centímetros de distancia. Se recomienda en todos los casos visitar al optometrista u oftalmólogo antes de comprar las gafas para que éste valore la capacidad visual, ya que cuando existe un problema previo a este trastorno, como puede ser la miopía (que afecta la visión de lejos), se necesita usar dos anteojos diferentes, según sea requiera leer de lejos o de cerca, o también suelen recetarse lentes bifocales o multifocales progresivas especiales.
- Lentillas bi o multifocales: las lentes de contacto tienen la ventaja de ofrecer una solución a los problemas de visión cercana y lejana al mismo tiempo.
- Monovisión: es un procedimiento que consiste en la corrección de un ojo para que sea capaz de efectuar la visión cercana y del otro para la lejana. Cabe mencionar que puede afectar la correcta percepción de profundidad y que de todos modos requiere de un período de adaptación.
- Lente intraocular: se trata de una cirugía que consiste en extraer el cristalino (un componente del ojo que se encuentra entre el iris y el humor vítreo) y sustituirlo por una lente intraocular de tipo multifocal. Es muy usado en pacientes que también se someten a una operación de catarata y no quieren usar gafas para la visión de cerca luego de la intervención. Como ocurre con cualquier operación, es posible que tengan lugar ciertas complicaciones; por citar dos ejemplos comunes, puede haber dificultad para ver de noche y percibirse destellos de luz. Dado que la presbicia es causada por el engrosamiento y endurecimiento del cristalino, su reemplazo representa una solución definitiva para el trastorno.
- Cirugía en la córnea: esta opción supone una operación con láser diferente para cada ojo, de manera que uno se adapte a la visión de lejos y el otro, a la de cerca, lo que en un párrafo anterior se describe con el nombre de monovisión. Asimismo se puede trabajar sobre la córnea con láser para que actúe como una lente multifocal o bifocal, aunque esto es más complicado y limitado que la aplicación de lentes intraoculares.
- IsoVision: es un tratamiento creado en 2008 que consiste en someter al paciente a dos sesiones de cirugía láser, una para tratar la visión de cerca y otra para la visión a distancia. Es una opción eficaz y duradera.