Pretensión es una noción procedente del latín praetensĭo que tiene diversos usos. Es habitual que se emplee para nombrar al pedido o la solicitud que una persona realiza con la intención de acceder a algo.
Por ejemplo: «Ya recibimos su pretensión: cuando tomemos una decisión al respecto, le informaremos», «La pretensión del intendente fue rechazada por legisladores opositores», «Siempre llegas con una pretensión diferente: primero cumple con tus obligaciones y luego vemos».
Una pretensión también puede ser un anhelo o una ambición que tiene un sujeto: «Ingresé a esta empresa con la pretensión de desarrollar una carrera y progresar cada año», «El delantero uruguayo quiere jugar en un equipo con pretensiones», «No tengo otra pretensión más que ayudar a mi comunidad».
La pretensión salarial
A la hora de buscar trabajo, surge el concepto de pretensión salarial, utilizado para expresar qué sueldo desea recibir o cuál está dispuesto a obtener quien está intentando dar con un empleo. Se trata de una información muy importante que hay que cuidar a la hora de optar a un puesto laboral y es que los encargados del departamento de Recursos Humanos la tienen muy en cuenta.
En concreto, los empleadores tienen en consideración esa respuesta dada porque les sirve para conocer la ambición, el esfuerzo o el compromiso, entre otros factores, de la persona en cuestión.
Para poder establecer una pretensión adecuada al puesto que se va a realizar, el posible empleado debe tener en cuenta desde la responsabilidad del cargo hasta la titulación exigida pasando por el número de trabajadores que se tendrán que «controlar» o incluso los sueldos que se barajan en ese momento en el mercado.
La noción en las relaciones de pareja
Dentro del ámbito de las relaciones de pareja, también cobra especial importancia el término que nos ocupa. En este caso concreto se hace referencia a lo que se conoce como pretensión sentimental. Esta expresión intenta definir qué es lo que espera conseguir una persona de su relación con otra.
Así, por ejemplo, puede suceder que al poco tiempo de comenzar una relación de pareja, una de las dos partes le pida a la otra que le explique cuál son sus pretensiones amorosamente hablando. Y es que será necesario que ambas personas tengan las mismas para que sigan juntas y hacia delante.
La pretensión en el derecho
En el ámbito del derecho, la pretensión es el objeto de un procedimiento judicial que consiste en solicitar un pronunciamiento al magistrado. La pretensión consiste en manifestar una voluntad para exigir que se cumpla una obligación o para el ejercicio de un derecho.
La pretensión, de este modo, es una acción jurídica que especifica una demanda de un sujeto para que el magistrado correspondiente ejerza el reconocimiento de un derecho y actúe contra el demandado. En la relación jurídica que surge, por lo tanto, aparecen tres actores: el pretendiente (quien realiza la demanda), el pretendido (el sujeto demandado) y el ente que ejerce la tutela jurisdiccional (el magistrado).
Las pretensiones, en definitiva, constituyen actos jurídicos que manifiestan la voluntad del pretendiente y que se constituyen como un derecho subjetivo, determinado y cierto.