Los rompecabezas ofrecen diversión para todas las edades, propiciando la relajación durante el proceso de realización, el conocimiento, la imaginación y la satisfacción ante cada diseño resuelto.
Los rompecabezas son pasatiempos que desde tiempos remotos cautivan a personas de todas las edades ya que, además de entretenimiento, brindan la posibilidad de hacer trabajar a la parte cognitiva, de despertar la curiosidad y de estimular la creatividad.
Esta clase de juego de mesa exige concentración y habilidad para armar un diseño que se encuentra fraccionado en piezas que deben unirse correctamente. La variedad de rompecabezas es enorme y plantea diferentes desafíos pensados para distintos rangos de edad, razón por la cual cada individuo tiene la chance de hallar el puzle que mejor se adapte a las preferencias o necesidades personales.
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ResumenClases de rompecabezas
Hasta la fecha se han desarrollado numerosas clases de rompecabezas que se diferencian entre sí por materiales, formatos, tamaños y tipo de desafío planteado, por citar algunas variables.
Con la tecnología, además, surgió la posibilidad de complementar los juegos físicos generando rompecabezas en línea, por ejemplo. Asimismo, los rompecabezas 3D han ido sorprendiendo a mucha gente grande por la evolución de estos productos lúdicos que, incluso, ya pueden conseguirse en 4D o más.
Para satisfacción de todas las generaciones, así como existen rompecabezas para adultos también hay para niños. Adolescentes y jóvenes pueden hallar estimulantes, por señalar alternativas populares, a los rompecabezas de Rubik y a los rompecabezas de Tetris.
Hay, en todos los casos, distintos niveles de dificultad. A medida que un chico va adquiriendo habilidades se incrementa su interés por ir resolviendo este tipo de desafíos y su capacidad de deducción para localizar la ficha, figura o secuencia que corresponda en cada situación.
De los rompecabezas didácticos y educativos más simples y seguros para los más pequeños (se fabrican, por ejemplo, puzles de goma eva, plástico o cartón para bebés) se va pasando a creaciones de mayor complejidad. Durante la época del jardín de infantes es frecuente que la mayoría de los nenes y las nenas disfruten los rompecabezas de bloques y los de animales que abarquen escasas piezas o que se diseñen a base de encastres. Poco a poco, el crecimiento y la madurez llevarán a más de uno a divertirse con rompecabezas de dominó.
Cuando ya se domina bien el lenguaje y se inicia el acercamiento hacia cifras numéricas, vocales y consonantes, es recomendable acercarle al público infantil tanto rompecabezas de letras y de palabras como de números y de criptograma.
La resolución de un puzle requiere concentración, paciencia, lógica y poder de deducción.
Si a lo largo de la existencia uno desea mantener el hábito de resolver rompecabezas, entonces irá eligiendo y alternando entre rompecabezas de arte, de acertijos, de enigmas, de origami y de Sudoku, por proponer un abanico de opciones.
Al ir enumerando propuestas para cada etapa de la vida no se puede dejar de resaltar que los rompecabezas de palabras cruzadas y los rompecabezas de anagramas resultan muy beneficiosos para los adultos mayores ya que los ayuda a ejercitar la memoria y a mantenerse activos.
Elementos y características de los puzles
A la hora de identificar los elementos y las características de los puzles es frecuente citar, en primer término, a las piezas. Estas unidades pueden oscilar entre una cantidad mínima (se comercializan, por indicar una referencia, rompecabezas de siluetas de entre dos y cuatro fichas destinados a la niñez) y un total desafiante (hay personas que invierten tiempo y paciencia en el armado de rompecabezas de 5000 piezas que, una vez finalizados, se exhiben o se lucen en el hogar como cuadros).
La categorización también tiene en cuenta tanto al diseño como a la imagen y al formato. Con fines decorativos se acostumbra priorizar a los rompecabezas de paisajes y a los de ciudades, por ejemplo. Se consiguen desde los tradicionales rompecabezas de apariencia cuadrada o rectangular hasta puzles de estructura circular y juegos para armar con orientación vertical.
El grado de dificultad planteado es otro factor evaluado como criterio de clasificación. Se trata de un dato orientativo muy valioso para segmentar los rangos de edad y saber para qué tipo de público es apto cada producto.
Por último vale la pena hacer foco en las modalidades de resolución. En este marco es útil saber que hay rompecabezas que se resuelven implementando un sistema de agrupación y otros que siguen una secuencia, sin dejar afuera de las menciones a los rompecabezas de lógica (que invitan a pensar para superar el reto).
Pensando en los bebés y los niños de corta edad se fabrican coloridos rompecabezas de madera, goma eva y plástico, entre otros materiales.
Beneficios de los rompecabezas
El armado de rompecabezas genera numerosos beneficios. A grandes rasgos, ofrece entretenimiento combinado con aprendizaje y anima a ir buscando herramientas y tácticas que permitan la resolución del desafío.
Aunque bien pueden ser parte de una actividad realizada en soledad, cuando el pasatiempo se comparte se convierte en un juego que requiere cooperación, un esfuerzo conjunto, para completarlo y pasar un buen momento en compañía de amigos o familiares.
Para el bienestar físico y mental también son recomendables. Está comprobado que los puzles son ideales para la estimulación cognitiva, contribuyen a mejorar la coordinación ojo-mano y favorecen el desarrollo de la concentración y de la paciencia. Por eso se los tiene en cuenta y se los implementa en el ámbito educativo, así como también genera excelentes resultados terapéuticos en terapia ocupacional.
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