Una deficiencia es una falla o un desperfecto. El término, que proviene del vocablo latino deficientia, también puede referirse a la carencia de una cierta propiedad que es característica de algo.
Por ejemplo: «El médico me dijo que tengo una deficiencia de calcio», «La deficiencia de este método es evidente: los niños no aprenden y, además, se aburren», «Los expertos creen que el edificio se derrumbó por una deficiencia en sus cimientos».
Distintos tipos de deficiencias
La deficiencia motriz, es la deficiencia neuronal que produce problemas en la locomoción (los movimientos) de la persona. Quienes sufren esta disfunción tienen dificultades de diversos grados para desplazarse o para coordinar sus movimientos.
La deficiencia de la hormona de crecimiento, por último, surge cuando el sujeto no logra producir la cantidad apropiada de la denominada hormona de crecimiento. Diversas estadísticas sostienen que este desequilibrio afecta a cerca de uno de cada cuatro mil niños. La hipoglucemia y el enanismo son algunos de los efectos principales de esta deficiencia que aparece por mutaciones genéticas, traumatismos, tumores o enfermedades congénitas.
En el caso de la deficiencia mental, se refiere a un déficit en la capacidad intelectual que se advierte desde la infancia y que genera dificultades en el comportamiento que se considera como normal.
En la actualidad, sin embargo, los especialistas prefieren utilizar el término de discapacidad intelectual y centrarse en cómo las personas que sufren de este trastorno cognitivo pueden mejorar su calidad de vida, integrarse a la sociedad y adquirir una mayor autonomía en su accionar.
Algunas definiciones relacionadas
La Organización Mundial de la Salud ha desarrollado las definiciones de algunos conceptos que suelen confundirse entre sí pero que significan cosas claramente diferentes, estos son:
Deficiencia: Desajustes en la forma de comportarse que dejan en evidencia un anormal funcionamiento del intelecto, inferior a lo normal que se espera dada la edad y sexualidad de la persona.
Discapacidad: cualquier restricción o funcionamiento anormal en los aspectos fisiológicos, anatómicos o psicológicos del organismo (pérdida de memoria, algún sentido o miembro)
Minusvalía: situación en la que un individuo se encuentra en desventaja con respecto a otro a causa de una discapacidad que le impide desempeñar cómodamente su rol social. (Imposibilidad de encontrar trabajo, relaciones sociales, estado de ansiedad o depresión)
Pese a la aceptación de estas definiciones, algunos especialistas sostienen que por ejemplo el término minusvalía podría ser nocivo dado que hace referencia a una validez menor, por esta razón, muchos colectivos buscan definiciones a esta incapacidad con connotaciones positivas, como lo es «capacidad diferente» en lugar de «discapacidad».
Análisis de la deficiencia mental
Para comprender el concepto de deficiencia mental, es necesario entender con antelación el de inteligencia, que hace referencia a esa facultad única de la persona para resolver conflictos e interactuar con el medio. Es importante señalar que existen tres formas de definir esta enfermedad, de acuerdo a los siguientes criterios:
*Psicométrico: se considera que una persona es deficiente mental si muestra un bajo rendimiento en sus capacidades intelectuales. Quienes se enfocaron en el desarrollo de la deficiencia de acuerdo a esta perspectiva fueron Binet y Simon.
*Sociológico: aquel individuo que presente dificultades para adaptarse a su entorno y llevar una vida autonómica, posee una deficiencia mental. Los autores más importantes en esta definición fueron Doll, Kanner y Tredgold.
*Biológico: esta enfermedad es causada por una predisposición biológica, fisiológica o anatómica que sale a la luz durante la etapa del desarrollo.
Otras líneas para definir la deficiencia mental son la impuesta por el criterio conductista (para interpretar la deficiencia es necesario tener en cuenta criterios ambientales, biológicos y la interacción entre ambos) y el pedagógico (debe considerarse en estudio principalmente el proceso de aprendizaje ordinario porque el déficit mental se manifiesta en una dificultad para llevar correctamente el aprendizaje.
Diferentes grados de comprensión
La deficiencia mental se divide en cinco niveles de acuerdo al grado de comprensión que las personas tengan, de acuerdo a las medidas del C.I, estos son:
*Límite o borderline: Personas con un Coeficiente Intelectual de 68-85. Manifiestan complicaciones en el aprendizaje, pero tienen acceso a desarrollar una vida sumamente normal.
*Deficiencia mental ligera: Individuos que poseen un C.I de 52-68 y manifiestas problemas en los aspectos motores y perceptivos, sin embargo pueden desarrollar buenas habilidades sociales y de comunicación, integrándose en el campo laboral y social que se propongan.
*Moderada o media: Su C.I. es de 36-51, que les permite desarrollar hábitos de autonomía, comunicarse oralmente aunque con dificultad para comprender los convencionalismos sociales.
*Severa: Personas con un C.I que está entre 20-35, y que no les permite tener una gran autonomía: lenguaje oral, motricidad y habilidades sociales muy pobres.
*Deficiencia mental profunda: Poseen un C.I inferior a 20 y muestran graves desgastes en la motricidad y la comunicación con su entorno. Son casi absolutamente dependientes de los otros en todo y rara vez pueden responder a tratamientos de rehabilitación.
Las causas de estos trastornos pueden ser un condicionamiento genético (la raíz viene dictada en los genes antes de la concepción del individuo), o por factores extrínsicos: perinatales (antes de nacer), neonatales (complicaciones en el parto), postnatales (complicaciones luego del nacimiento)Para terminar es necesario aclarar que es fundamental la integración social de las personas que padecen algún tipo de deficiencia a fin de prodigarles una vida más feliz a través de un desarrollo integral. Para ello es necesario planificar herramientas educativas especiales adaptadas a las necesidades de estas personas.