La formación docente en tecnología resulta indispensable para promover la alfabetización digital.
La alfabetización digital es la aptitud o la destreza de un individuo para realizar tareas en Internet o haciendo uso de recursos informáticos. Se considera que actualmente este tipo de formación es indispensable para desarrollarse a nivel cultural, social y laboral.
El Estado, por lo tanto, tiene la responsabilidad de impulsar la alfabetización digital. La educación tecnológica debe estar contemplada en las propuestas formativas públicas para favorecer la integración de todas las personas y reducir las desigualdades en la sociedad.
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ResumenImportancia de la alfabetización digital
La alfabetización digital resulta imprescindible en el mundo de hoy. Se requieren habilidades informáticas y dominar la navegación web para solicitar turnos médicos, gestionar una cuenta bancaria o hacer trámites en una oficina estatal, por mencionar algunas posibilidades. La competencia digital también permite comunicarse a través de las redes sociales, enviar un correo electrónico o llevar a cabo una búsqueda en línea, entre muchas otras acciones que hoy son cotidianas.
Aquel que no está capacitado para completar estas actividades no se encuentra en condiciones de integrarse plenamente a su comunidad. Sin una formación básica en TIC (Tecnologías de la Información y Comunicación), la persona en cierta forma queda afuera de la sociedad.
Por supuesto, además de la formación en TIC, se requiere de conexión a Internet y de la disponibilidad de un teléfono inteligente o una computadora. De lo contrario, el universo virtual seguirá siendo inaccesible.
Impulsar la alfabetización digital permite que más personas se formen con MOOC (Cursos Online Masivos y Abiertos) y otros recursos.
Habilidades básicas
Es importante señalar que alfabetizar supone enseñar a un sujeto a leer (comprender el significado de lo escrito) y a escribir (plasmar pensamientos a través de letras que se trazan en una superficie). Ambas acciones (leer y escribir) son fundamentales para interactuar con los demás y recibir y transmitir información.
La idea de alfabetización digital, en este marco, se asocia al dominio de ciertas herramientas y servicios informáticos que se consideran básicos. Con la masificación de Internet y la proliferación de dispositivos móviles, diversos recursos digitales están presentes en lo cotidiano: sin conocimiento acerca de ellos, es imposible realizar diversas tareas, cumplir con trámites o incluso comunicarse de manera eficaz.
Si bien no existe un listado específico o concreto de programas informáticos y servicios online que deberían incluirse en un plan de alfabetización digital, queda claro que saber usar herramientas de ofimática es indispensable tanto en el ámbito profesional como en el académico. Se espera que todas las personas sepan utilizar, al menos de una forma primaria, un procesador de texto y una hoja de cálculo.
Entre los sistemas operativos que se emplean en computadoras (ordenadores), Windows de Microsoft está presente en cerca del 70% de los equipos. Por eso es casi ineludible conocer cómo funciona.
Manejar herramientas de diseño, gestores de contenido, sistemas de mensajería instantánea y plataformas de videoconferencia son otras habilidades que, en mayor o menor medida, están contempladas en la alfabetización digital.
La alfabetización digital es necesaria para favorecer el acceso a entornos virtuales de aprendizaje.
Tipos de alfabetización digital
Se puede diferenciar entre tres tipos de alfabetización digital de acuerdo al nivel de destreza que se alcanza. Hay, en este sentido, un primer nivel básico que se alcanza cuando la persona aprende a usar los recursos tecnológicos.
Una vez que se tienen conocimientos sobre su utilización, se puede pasar al siguiente nivel de alfabetización digital, asociado a la comprensión del uso. En este punto el sujeto entiende los efectos o las consecuencias de las prácticas digitales, pudiendo usarlas a su favor.
Finalmente llegamos al nivel superior que se relaciona con la creación de contenidos. El usuario ya no solo puede acceder a la información y comprenderla, sino que también está preparado para elaborarla y transmitirla.
Cuidar la seguridad
No se puede dejar de mencionar que la alfabetización digital ayuda a cuidar la seguridad cibernética. A medida que se adquieren conocimientos sobre las herramientas informáticas, se aprende también sobre los riesgos de uso.
Proteger la privacidad en línea, por ejemplo, es imperioso para no ser víctima de diferentes tipos de delito. Así, aquel que no sabe cómo identificar un sitio web seguro o que no comprende el peligro de difundir información personal en las redes sociales, por ejemplo, se encuentra muy expuesto.
La alfabetización digital según la UNESCO
De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), las tecnologías digitales son una «necesidad social» para asegurar la educación como derecho humano. Gracias a ellas, se promueve la inclusión, surgen alternativas de aprendizaje y se mejora la calidad educativa.
Con esto en claro, la UNESCO busca fomentar la alfabetización digital, apuntando tanto a los alumnos como a los educadores. El organismo sostiene que las tecnologías digitales deben ser consideradas como un bien común, por lo cual los Estados tienen que diseñar y poner en práctica planes a nivel nacional para estimular el aprendizaje digital.
Cabe destacar que la UNESCO también incentiva la alfabetización mediática y la alfabetización informacional en conjunto con la alfabetización digital. De este modo aspira a que los ciudadanos puedan navegar de manera segura y responsable, empleando la información con espíritu crítico y contribuyendo a que el ecosistema informativo sea confiable.
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