La bioinformática es una disciplina que permite aplicar herramientas de la informática al estudio y la gestión de datos de la biología. En su campo interactúan diversas áreas del conocimiento como las ciencias de la computación, la estadística y la química.
La medicina hace uso de la información aportada por la bioinformática para desarrollar trabajos de investigación y mejorar las tareas de prevención, diagnóstico y tratamiento de dolencias y enfermedades. La bioinformática, en este marco, puede ser muy útil para el análisis de elementos de escala muy reducida, como las proteínas y los genes.
Características de la bioinformática
El desarrollo y la aplicación de recursos computacionales para el manejo de datos médicos o biológicos es el eje de bioinformática. Su finalidad es la creación de las herramientas que permitan obtener, almacenar, analizar y exhibir este tipo de datos.
Es habitual que el concepto de bioinformática se confunda con otras nociones. La biología computacional, por ejemplo, está centrada en la creación de modelos teóricos y de técnicas de simulación. La biocomputación, por su parte, aspira a la producción de computadoras (ordenadores) que tengan componentes de tipo biológico o que funcionen como un ser vivo.
Una definición simplificada señala que la bioinformática consiste en la creación de herramientas informáticas para analizar y gestionar datos de interés para la biología. La bioinformática también puede entenderse como una disciplina que utiliza y procesa información para comprender aspectos biológicos.
Sus objetivos
Además de todo lo expuesto, podemos subrayar el hecho de que la bioinformática cuenta con tres objetivos claramente delimitados :
- Ofrece recursos y herramientas que puedan ayudar al análisis de datos.
- Organizar toda la información en bases de datos o BBDD. De esta manera, se facilitará al investigador no solo acceder a las mismas sino analizar y trabajar con ellas en pro de sus proyectos para llegar a nuevos resultados y conclusiones.
- Utilizar los datos y los recursos para analizarlos a fondo y proceder a realizar una interpretación de los resultados.
Aplicaciones de la bioinformática
La anotación (marcado) de los genes, el análisis de las secuencias de ácido desoxirribonucleico (ADN) y el estudio de la expresión génica y de las proteínas son algunos de los objetos de estudio de la bioinformática.
No menos importante es conocer que en la actualidad la bioinformática se utiliza de muchas maneras:
- Para proceder al diseño de medicamentos, lo que repercutirá de forma muy positiva en los seres humanos que pueden dar con un fármaco adecuado para sus patologías.
- Para buscar similitudes entre distintas moléculas. Esto es relevante dentro de los estudios que se acometen sobre la evolución.
- Para estudiar a fondo y analizar el cambio climático. Un trabajo realmente importante en pro de la humanidad y del medio ambiente en general. Esta función es una de las que más valor tiene en los últimos años debido al aumento de la preocupación por el calentamiento global.