Lo primero que vamos a hacer es determinar el origen etimológico del término club. Al hacerlo descubriremos que se trata de una palabra que procede del inglés, más exactamente del vocablo club que, a su vez, emana del germánico klubba, que es sinónimo de “montón de leña”.
Un club es una sociedad creada por un grupo de personas que comparten ciertos intereses y que desarrollan conjuntamente actividades culturales, recreativas o deportivas. Los miembros de un club se asocian libremente con la intención de enriquecer su vida social.
Por ejemplo: “Si mañana está soleado, nos vamos a pasar el día al club”, “Juan se encuentra en el club: fue a jugar al fútbol con sus amigos”, “Hoy hubo un accidente en la piscina del club y tuvieron que rescatar a un niño”.
Funcionamiento de un club
En un club pueden desarrollarse actividades muy diversas. Existen clubes deportivos, clubes culturales y de otro tipo. Todas estas instituciones tienen en común la ausencia de ánimo de lucro. Esto quiere decir que los clubes no se crean para obtener un rédito económico, aunque pueden buscar ingresos para solventar su funcionamiento.
Para asociarse a un club, es necesario abonar una cuota que permite disfrutar de las instalaciones y eventos de las instituciones. En algunos casos, también se debe pagar un derecho de inscripción a la hora de anotarse.
Distintos tipos
Los clubes de fútbol son los más conocidos a nivel mundial ya que mueven millones de dólares. Este deporte se ha convertido en una gran industria y sus jugadores son verdaderas celebridades. FC Barcelona, Real Madrid, Boca Juniors y River Plate son ejemplos de clubes de fútbol.
Se conoce como club náutico, por otro lado, al club deportivo que está dedicado a la práctica de actividades náuticas. Dentro de este grupo existen diversos tipos de entidades, como los clubes de vela o los clubes de yates.
De la misma manera, también están los llamados clubes nocturnos. Estos suelen ser locales de ocio que, como su propio nombre indican, abren sus puertas por la noche y en ellos los asistentes pueden no sólo tomar unas copas sino también asistir a los diferentes espectáculos que se realizan en el escenario.
Todo ello sin olvidar que en algunos países también se utiliza el término club para referirse a los locales de prostitución donde los clientes pueden ser testigos de espectáculos de striptease, beber alcohol y mantener relaciones sexuales.
«El club de los poetas muertos»
Además de todo lo expuesto tendríamos que establecer que una de las películas que se ha convertido en un clásico es la que lleva por título precisamente “El club de los poetas muertos” (“La sociedad de los poetas muertos” en América Latina). En el año 1989 fue cuando Peter Weir, conocido por otros filmes como “Matrimonio de conveniencia” o “La costa de los mosquitos”, estrenó esta producción.
La historia que se nos cuenta es la de un profesor, al que da vida Robin Williams, que comienza a trabajar en un colegio prestigioso a la par que anticuado. Allí establecerá una relación muy estrecha con sus alumnos a través de las clases de Literatura y les enseñará valores tales como luchar por encontrar la felicidad y por ver cumplidos los sueños.