El código penal es un bloque sistematizado de características unitarias donde figuran las normas jurídicas punitivas de una nación. Abarca, por lo tanto, las leyes que son aplicables desde el punto de vista penal. En este sentido, el código penal plasma el ius puniendi (la facultad sancionadora) del Estado.
En todo código penal se recogen, por ejemplo, las penas privativas de libertad que existen para toda persona que cometa un delito. Cuando hablamos de delito nos estamos refiriendo desde homicidios hasta abusos, tráfico de influencias, malversación o robos pasando por lesiones o calumnias.
Un conjunto de reglas
Cabe destacar que, en el campo del derecho, se define como código al grupo de reglas legales sistemáticas que sirven para regular, de manera unitaria, a un determinado asunto. Esta definición permite que se conozca como código a la recopilación sistemática de diversas leyes y al conjunto de normas vinculadas a una cierta materia.
El código civil, por citar una expresión concreta, describe al grupo ordenado, sistematizado y unitario de reglas de derecho privado que rigen sobre las relaciones civiles de las personas tanto físicas como jurídicas, sean privadas o públicas (siempre que las personas actúen como particulares). El código de comercio, por su parte, es el conjunto de normas y preceptos creados para regular las relaciones mercantiles.
El Código Penal de España
Si nos centramos en lo que es el Código Penal de España podemos establecer que las penas máximas en prisión que se establecen, por ejemplo, para agresores sexuales son de quince años, mientras que para los que han llevado a cabo un homicidio superan en muchos casos los dieciocho años. Para que en este último caso la sentencia establezca que permanezca en la cárcel más de esos dieciocho años se tiene que contar con agravantes como el ensañamiento o la alevosía.
En este sentido, junto a lo que son los homicidios, los delitos que llevan a que quienes los han cometido pasen más tiempo privados de libertad son el genocidio (actos realizados para acabar con un grupo racial, étnico o religioso), el terrorismo y el magnicidio (asesinato u homicidio de una persona importante).
Siguiendo con el ejemplo de España, cuyo código penal actual se aprobó en 1995 mediante ley orgánica (Ley Orgánica 10/1995), se puede determinar que los delitos que tienen unas penas máximas inferiores son los siguientes: el acoso sexual que puede incluso no llegar al año de prisión, la prevaricación que sigue la tónica del anterior caso citado o el tráfico de influencias que, como mucho, alcanza los dos años de cárcel.
Francia, el país pionero
Al igual que en el caso del código civil y el código de comercio, Francia fue el país pionero en materia de código penal.
Durante el gobierno de Napoleón Bonaparte se promulgó el primer código penal moderno con el objetivo de estructurar el sistema jurídico y evitar las contradicciones entre las diversas normas dispersas que regían el sistema penal francés.
La importancia del código penal
La existencia de un código penal supone que los ciudadanos pueden conocer que actos están tipificados como delitos y, de esta manera, evitarlos. Por otra parte, el código penal garantiza que una persona no será castigada por un acto que no se encuentra prohibido por la ley.
De todas maneras, es importante tener en cuenta que no toda la legislación penal suele ser recogida en el código penal, sino que también existen leyes penales especiales y leyes no penales pero con contenido penal.