Se llama comedor al ambiente o espacio que se destina al acto de comer (ingerir alimentos). En las viviendas, el comedor puede ser una habitación dedicada exclusivamente a esta acción o un sector integrado a otro ambiente (como la cocina-comedor o el living-comedor).
Por ejemplo: «La cena ya está lista, pueden ir pasando al comedor», «Tengo ganas de cambiar la mesa del comedor por una más moderna», «Cuando escuché la explosión, estaba sentado en el comedor junto a mi esposa y mi hija mayor».
El comedor de una casa puede usarse en el desayuno, el almuerzo, la merienda y/o la cena. Por lo general está ubicado cerca de la cocina y presenta los muebles necesarios para que la gente pueda comer con comodidad: sillas, una mesa, etc.
A la hora de decorar un comedor se hace imprescindible tener en cuenta las tendencias que imperan en materia de interiorismo en cada momento. Así, por ejemplo, hay que saber que lo son los comedores abiertos que se comunican con la cocina directamente, los de estilo minimalista, los que cuentan con muebles de diseño, los rústicos donde la madera es la gran protagonista y también los que disponen de elementos de marcado look vintage. Eso sin olvidar los que se presentan con una isla en medio.
También hay comedores en los establecimientos educativos, las empresas y los hoteles, por citar algunas posibilidades. En estos casos, las personas utilizan el espacio en cuestión para comer en medio de sus obligaciones o actividades cotidianas. Supongamos que los alumnos de una escuela cursan de 8 a 16 horas. Para que los chicos almuercen, el establecimiento cuenta con un comedor adonde los estudiantes acuden entre las 12 y las 13 para comer. Una compañía de tecnología también puede contar con un comedor donde se sirve el almuerzo a los empleados.
Cada vez son más las empresas, colegios, institutos y universidades que apuestan por disponer de comedor en el que los trabajadores, en el primer caso, y los alumnos y profesores, en los demás casos, puedan alimentarse adecuadamente al mediodía sin necesidad de tener que trasladarse hasta sus casas para tomar el almuerzo.
Ese comedor debe estar en manos de un catering para colectividades que no solo cuente con experiencia sino también que disponga de profesionales titulados y cualificados al tiempo que prepare los platos con productos de temporada y de primera calidad.
De la misma manera, es esencial que ese catering cumpla con todos los requisitos necesarios en materia de seguridad alimentaria y que tenga muy en cuenta las necesidades alimentarias de las personas que van a acudir al comedor. Así, por ejemplo, si se trata de un catering para un colegio deberá tener en cuenta qué nutrientes necesitan los niños a esas edades para así establecerles un menú adecuado.
Un comedor, por otra parte, puede ser un establecimiento que sirve, de manera gratuita, comidas a personas carenciadas. Estos lugares, conocidos como comedores comunitarios o comedores populares, realizan una acción de beneficencia, muchas veces con ayuda económica del Estado, de ONGs o de los vecinos.
