Para poder conocer el significado del término enfrentamiento se hace necesario descubrir su origen etimológico. En este caso, podemos exponer que es fruto de la suma de los siguientes componentes de dicha lengua:
-El prefijo “en-”, que significa “hacia adentro”.
-El sustantivo “frontem”, que puede traducirse como “frente”.
-El sufijo “-miento”, que es sinónimo de “resultado” o de “medio”.
Enfrentamiento es el acto y la consecuencia de enfrentar. Este verbo (enfrentar), por su parte, hace referencia a poner o ponerse frente a frente.
Un enfrentamiento, por lo tanto, puede producirse cuando dos personas o dos grupos discuten o se pelean por algo. Supongamos que dos hombres empiezan a debatir sobre fútbol en un bar. La discusión va subiendo de tono hasta que ambos empiezan a insultarse y a empujarse. El enfrentamiento continúa en la calle, donde se toman a golpes de puño. En este caso, los dos individuos se enfrentan con violencia, cada uno pretendiendo defender su posición e imponer sus ideas al otro.
Por supuesto, no todos los enfrentamientos llegan a la agresión física. Suele decirse que dos sujetos se enfrentan si mantienen un diálogo acalorado que incluye acusaciones, denuncias o ataques verbales. Un diputado conservador y un legislador socialista, por citar un caso, pueden protagonizar un enfrentamiento dialéctico en un debate por TV.
En el ámbito del deporte, un enfrentamiento es un encuentro que tienen dos competidores en el campo de juego. Cada uno intenta obtener un triunfo y, por lo tanto, derrotar al rival. Por ejemplo: “El enfrentamiento más importante de la fecha será el que mantengan Real Madrid y Barcelona en el estadio Santiago Bernabéu”, “En el enfrentamiento de anoche, Boca Juniors tuvo tres jugadores expulsados y cinco amonestados”, “El tenista italiano recién logró imponerse por primera vez al alemán en el noveno enfrentamiento que tuvieron”.
En el ámbito de la historia es muy habitual que se hable de enfrentamientos bélicos. De esta manera, se hace alusión a los conflictos en los que participan dos o más grupos y que les lleva a luchar con armas de distinta tipología.
Entre los más relevantes enfrentamientos bélicos que se han producido nos encontramos con la I Guerra Mundial, que se identifica no solo porque provocó la muerte de millones de personas sino porque en la misma se vieron implicados más de treinta países, y con la II Guerra Mundial, que está considerada el conflicto más sangriento de toda la historia.
No obstante, no podemos pasar por alto otros también muy relevantes como la Guerra de Vietnam (1955 – 1975), la Guerra de los Balcanes (1991 – 2001), la Guerra de Irak (2003 – 2011) o la Guerra de Siria, que comenzó en el año 2011 y que aún hoy, ocho años después, continúa.
Asimismo, también adquieren relevancia como enfrentamientos bélicos desde la Batalla de Trafalgar (1805) hasta la Batalla de Austerlitz (1805) pasando por las Guerras Cántabras (29 a.C – 19 a.C) o la Batalla de las Espuelas de Oro (1302).
La noción de enfrentamiento civil, por otro lado, alude a un conflicto protagonizado por distintos sectores de una población. En cambio, un enfrentamiento militar implica la lucha entre fuerzas armadas convencionales (ejércitos).