Una flor es el brote compuesto por hojas coloridas que surge en diversas plantas y a partir del cual se desarrolla el fruto. Su origen etimológico nos lleva al latín flos – floris y se asocia a la diosa de la mitología romana Flora, que representaba a las flores y a la primavera.
Muchas veces la flor es un brote con capacidad reproductora: genera, mediante reproducción sexual, las semillas que permiten la aparición de nuevos ejemplares de las plantas. Las flores disponen de un tallo con hojas (tanto fértiles como no fértiles).
El sector estéril de la flor, que rodea y protege a los órganos sexuales, recibe el nombre de perianto. Esta estructura se compone del cáliz (cuyas piezas se llaman sépalos) y la corola (compuesta por los pétalos).
La flor como elemento decorativo
Gracias a los colores y las formas de los pétalos y al perfume, las flores son utilizadas como elemento decorativo. También constituyen un regalo habitual que se realiza para homenajear a una persona, sobre todo a una mujer. Por ejemplo: «Para nuestro aniversario, mi marido me regaló unas flores hermosas», «Mi vecino me obsequió una flor y me invitó a ir al cine», «Al término de la función, la actriz recibió flores y un pastel por su cumpleaños».
Un ramo o una cesta de flores, en este marco, son obsequios clásicos en fechas como el Día de San Valentín o el Día de la Madre. En una fiesta de casamiento, el arreglo floral es un elemento central de la decoración de las mesas, así como el bouquet de novia es tradicional en la ceremonia.
En un jardín, las azaleas, las azucenas, las begonias, las dalias, las gardenias, los geranios, las hortensias, los jacintos, las magnolias, los pensamientos, las rosas y las violetas están entre las flores más elegidas. Cada jardinero, por supuesto, debe considerar las características climáticas del lugar para definir qué especies son apropiadas.
Si nos remitimos a Asia, podemos destacar la existencia del ikebana (arte floral japonés). Su origen está vinculado al arribo del budismo al territorio nipón en el siglo VI.
Es importante saber, asimismo, que la floricultura es la técnica y el arte del cultivo de las plantas con el objetivo de conseguir las flores, que luego se ponen a la venta en puestos del mercado, viveros o floristerías.
Resulta curioso que, dada la belleza de las flores, incluso se imita su apariencia. Por eso se fabrican flores de papel y flores de tela, o se realizan estampados con diseño floral.
La aromaterapia y otros tratamientos
La aromaterapia es una medicina alternativa que apela al aroma de las flores para contribuir al bienestar. El aceite esencial de lavanda es uno de los más usados con este fin.
Las flores de Bach, en tanto, son elaboraciones que se preparan con esencia floral para utilizar en distintos tratamientos. Hay que tener en cuenta que la medicina convencional (científica) no aprueba este tipo de prácticas ya que sus supuestos beneficios no han sido demostrados de manera fehaciente. Más allá de esta cuestión, hay pueblos con tradiciones ancestrales que apelan a flores medicinales para incidir en la salud.
Las flores como inspiración para artistas
Las flores han inspirado a numerosos artistas de las distintas disciplinas existentes. La pintura de flores, por ejemplo, es muy popular y ha generado cuadros como «Mano con ramo de flores» de Pablo Picasso. Las flores en la música también son habituales, como lo demuestra la canción «Flor de lis» del grupo Ketama.
Precisamente la flor de lis es un símbolo importante de la heráldica, representando a la flor de lirio con la que se identificaba a las familias que pertenecían a la realeza francesa.
La mención a flores en la literatura, por otra parte, es recurrente. «Flores robadas en los jardines de Quilmes», por indicar un caso, es el título de una novela del argentino Jorge Asís que se publicó en 1980 y se convirtió en un best seller.
Tampoco se puede dejar de aludir a la fotografía de flores, un recurso frecuente entre quienes optan por retratar a la naturaleza.
Un nombre femenino
Además de todo lo indicado, podemos señalar que Flor también es un nombre de mujer. Se atribuye a féminas aventureras, independientes, con una gran belleza interior y que siempre están dispuestas a ayudar a los demás. Todo eso sin pasar por alto que poseen capacidad de liderazgo, sensibilidad y una enorme pasión por el medio ambiente.
Otras características que se les atribuyen a las mujeres llamadas Flor son que valoran mucho la amistad y la familia, necesitan sentirse útiles y rechazan en todo momento cualquier tipo de conflicto.
Otros usos del concepto de flor
La idea de flor, por otra parte, puede emplearse para aludir a la virginidad: «Cuando era chica, mi abuela siempre me decía que guarde mi flor hasta conocer al muchacho indicado».
En algunos países, se emplea la expresión «flor de» para resaltar una magnitud o un grado de algo: «¿Cómo se te ocurre dejar la casa sola y con la puerta abierta? Eres flor de idiota», «¡Flor de susto me llevé al ver el vidrio roto!».